NOTA DE OPINION – He aprendido muchas cosas a través de la vida. Por Yolanda Arriola.- He aprendido que no puedo hacer que alguien me ame, solo convertirme en alguien a quien se puede amar. El resto depende de los otros.
– He aprendido que se pueden requerir años para construir la confianza y únicamente segundos para destruirla.
– He aprendido que lo que verdaderamente cuenta en la vida, no son las cosas que tengo alrededor, sino las personas que tengo alrededor.
– He aprendido que puedo encantar a la gente por 15vminutos. Después de eso necesito poder hacer más.
– He aprendido que no puedo compararme con lo mejore que hacen los demás, sino con lo mejor que puedo hacer yo.
– He aprendido que lo más importante no es lo que me sucede sino lo que hago al respecto.
– He aprendido que hay cosas que puedo hacer en un instante, y que pueden ocasionar dolor durante toda una vida.
– He aprendido que es importante practicar para convertirme en la persona que yo quiero ser.
– He aprendido que es mucho mas fácil reaccionar que pensar… y mas satisfactorio pensar que reaccionar.
– He aprendido que puedo llegar mucho mas lejos de lo que pensé posible.
– He aprendido que soy responsable de lo que hago, cualquiera que sea el sentimiento que tenga.
– He aprendido que si no controlo mis actitudes ellas me controlan a mi.
– He aprendido que por apasionada que sea una relación en un principio, la pasión se desvanece y algo más debe tomar su lugar.
– He aprendido que los héroes son las personas que hacen aquello de lo que están convencidos, a pesar de las consecuencias.
– He aprendido que el dinero es un pésimo indicador del valor de algo o alguien.
– He aprendido que en muchos momentos tengo el derecho de estar enojado, mas no el derecho de ser cruel.
– He aprendido que el verdadero amor y la verdadera amistad, continúan creciendo a pesar de las distancias.
– He aprendido que simplemente porque alguien no me ama de la misma manera en que yo quisiera no significa que no me ame a su manera.
– He aprendido que no siempre es suficiente ser perdonado por los otros, a veces tengo que perdonarme a mi mismo.
– He aprendido que por más fuerte que sea mi duelo, el mundo no se detiene por mi dolor.
– He aprendido que mientras mis antecedentes y circunstancias puedan haber influenciado en lo que soy, yo soy responsable de lo que llego a ser.