“Hay razones para que la gente estalle y será enorme el estallido. No es fácil en este momento adivinar cuáles serán sus consecuencias”, presagió el cientista político Jaime Durán Barba en un reportaje concedido a Perfil. Y aventuró otra frase alarmante: “los políticos suelen invocar creencias, no realidades”, además de señalar que los asesores en comunicación y campaña suelen ser militantes y no profesionales. ¿Están captando hoy día los candidatos la psiquis de quienes pretenden su voto?.
Por: Darío H. Schueri – Desde Santa Fe
Faltan tres domingos para las elecciones; “las más importantes desde 1983”, supo definir el economista Carlos Melconián. ¿Están leyendo los candidatos la realidad psico social de los electores?. ¿Advierten que podría ser esta una elección bisagra?. ¿Enfocan sus mensajes hacia las “realidades” y no hacia las “creencias”, como dice Durán Barba?. ¿Evalúan, por ejemplo, que después de lo ocurrido en el 2019, el electorado podría no querer más jugar al “voto advertencia” y definir todo en primera vuelta?.
Tres frentes que disputarán firmemente bancas, y una candidata allende el mundo de la política, cuya proyección habría que estudiarla casi científicamente, son los máximos protagonistas de esta compulsa electoral de medio término. Elecciones que depositarán en el Congreso nacional a los diputados y senadores que, además de marcar el rumbo en los próximos tiempos, estarán allí cuando asuman las nuevas autoridades nacionales en el 2023.
El peronismo en su momento interno mas difícil
La cada vez más picante interna peronista se coló el jueves pasado en la Cámara de Senadores, cuando Armando Traferri, quien se considera “víctima de un ensañamiento” según advierte “de propios compañeros”, enfiló directa y peligrosamente hacia la figura del Gobernador y sus principales referentes políticos en torno del juego clandestino (en Rafaela), al momento de defenderse de acusaciones que pesan judicialmente en su contra sobre la cuestión.
Una sesión más de este tenor y, al decir de los españoles, nadie le arrendaría la ganancia al peronismo, que superada la extenuante PASO deberían marchar “unidos en la diversidad” en pos del triunfo final, tal cual pregonan desde la Casa Gris: “nuestro objetivo es ganar la Provincia el 14 de noviembre”.
Omar Perotti necesita vencer en esta batalla, y por varios cuerpos de ventaja; no puede perderla por nada del mundo. Y para fortalecer el ánimo de la tropa, no se quedó en el comando de operaciones dando instrucciones; se calzó el uniforme y salió al campo de batalla a matar o morir junto a sus soldados.
El Gobernador piensa que está plebiscitando su gestión en esta compulsa interna, y así se lo hace saber a sus funcionarios, a los que arenga militar con sangre sudor y lágrimas “su” lista. Nadie imagina en la Casa Gris un resultado adverso, precisamente porque proyectan los ánimos del Gobernador en tal hipotético caso.
Para alcanzar el objetivo, además del voto peronista – kirchnerista militante, Omar Perotti necesita que una porción del “voto independiente” incline la balanza a su favor en caso de una paridad de fuerzas partidaria con Agustín Rossi. Para ello insta a resaltar los logros de gestión, tales como la billetera Santa Fe, el plan de vacunación y el ambicioso programa de obras públicas en marcha.
Juntos por el Cambio pone en juego la corona
Hace cuatro años, Cambiemos obtuvo un triunfo apoteósico de la mano de Mauricio Macri por entonces Presidente, colando cinco de los nueve diputados en disputa. Este año pone en juego aquel título: revalidar las cinco bancas.
En el medio “pasaron cosas”: el macrismo perdió las presidenciales del 2019; pero los triunfadores hoy presentan un estado de debilidad similar al de hace cuatro años. ¿Sabrán cómo aprovechar esta oportunidad?.
En el hoy Juntos por el Cambio, el radicalismo tendrá entre las ocho de la mañana y las seis de la tarde del 12 de setiembre, su propia interna dentro de la interna con tres candidatos del cuño (Pullaro, Corral y Barletta), que tratarán de retener el voto radical en primera instancia (el Partido tiene 170 mil afiliados) para luego enamorar al electorado “independiente”, a manera de plusvalía de sus chances. Sector independiente por el cual irá decididamente el candidato del PRO (Angelini), huérfano del tradicional “voto partidario”.
Lo que se puede advertir es que José Corral y Mario Barletta (a través de su precandidata a senadora Carolina Losada) ajustan sus miras telescópicas hacia el gobierno nacional, sin dejar de advertir el pasado “cambiemita” de uno y otro. De todos modos, el “objetivo” Perotti comenzó a ser una opción, al menos para el sector de Barletta- Losada.
Maximiliano Pullaro y su escuadrón NEO, recién llegados al ejército Cambiemos, basan su fortaleza en los territorios gobernados por hombres y mujeres de su sector, la militancia radical naturalmente, y una estrategia de confrontación contra el principal candidato de una de las listas peronistas: Omar Perotti pegándole en su víscera más sensibles hoy día: la inseguridad, junto con su complacencia al gobierno nacional.
Pullaro tampoco quiere que imprescindibles votos independientes de “centro-derecha” sean pescados por el Gobernador; en un escenario radical de tres tercios, esa franja de votantes será gravitante.
Federico Angelini, el candidato PRO en Juntos por el Cambio, cimenta su estrategia en asociar los referentes nacionales de su Partido (Macri, Bullrich, Larreta) con la genuina oposición a Cristina Fernández de Kirchner, además de la figura pública de Amalia Granata.
EL FAP define una nueva historia
El Frente Amplio Progresista (FPCyS para las candidaturas locales) definirá el cierre de un ciclo político histórico que tuvo en sus inicios a Guillermo Estévez Boero y terminó con la abrupta muerte de Miguel Lifschitz.
Después de estas elecciones aparecerán los nuevos liderazgos en ese sector de centro izquierda progresista.
De tal manera, Pablo Javkin con su partido Creo aliado al ex socialista Rubén Giustiniani, y Clara García junto a la flamante titular del PS nacional Mónica Fein, escribirán las nuevas páginas de lo que fuera el exitoso FPCyS, nacido hace 20 años y con 12 años de gobierno en la Provincia.
García y Giustiniani encabezarán las listas de precandidatos a senadores nacionales del FAP. Su coto de caza es el socialismo y la izquierda moderada. Pero una porción de voto independiente progresista no les vendría mal a ninguno de los dos.
¿El factor sorpresa?
Los armadores de la campaña de UNITE están más que entusiasmados con la receptividad de su challenger Alejandra “locomotora” Oliveras, quien a cada paso en su gira provincial no deja de recibir calurosas adhesiones del público. No pocos la comparan con Miguel Del Sel cuando arrancó en política allá por el 2011.
Oliveras, junto a la precandidata a senadora nacional Betina Florito, sin llegar al extremo de promover la anti política, invita a votar “algo nuevo” dentro de los valores tradicionales de la familia, trabajo, estudio y deporte sobremanera para los jóvenes con la finalidad de alejarlos de las adicciones y el delito, e invitando a salir de la “grieta” que promueven las otras fuerzas políticas.
¿Habrá realmente factor sorpresa en estas elecciones?. ¿O todo ya está definido en el inconsciente electoral de la población a 20 días de las elecciones?