El “Frente de Frentes” pergeñado por el FPCyS para ampliar su capital accionario electoral para enfrentar al “kirchnerismo nacional y provincial”, atravesaba aguas torrentosas, habida cuenta que difícilmente Miguel Lifschitz – y el socialismo en general – aceptara al PRO como aliado.
Por: Darío H. Schueri – Desde Santa Fe
Fue el propio presidente de la Cámara de Diputados y ex Gobernador quien dio por cerrada la cuestión: “el proyecto que llevó adelante Cambiemos tenía una visión política y económica que no compartimos en absoluto. Nosotros fuimos oposición durante su gobierno”, definió Lifschitz este martes en la emisora Aire de Santa Fe de esta capital.
Ya el lunes entrevistado por Rosario 3, el ex gobernador expresó que «no creemos que la sociedad nos esté pidiendo eso (una alianza con el PRO), tampoco hay un diálogo, coincidencias de programas, ideas, principios, que nos permitan pensar en esto. Creo que es un momento de pensar, más que en estructuras y rejuntes políticos, cómo logramos mayor cercanía con la opinión pública, con la sociedad civil. Hay que tener un conjunto de personas que sean confiables, que generen expectativa en la sociedad y una propuesta», expresó.
En esta capital, en el programa “Ahora vengo” de Aire de Santa Fe, Lifschitz planteó que el socialismo no comparte la idea de sociedad con el PRO: “nosotros hemos sido muy críticos de la grieta, que es muy negativa para la Argentina e impide el avance del país y la solución de los problemas estructurales. Y no queremos traer la grieta a Santa Fe”, apuntó.
De esta manera, Lifschitz se abrió de la iniciativa lanzada por la UCR que propone una alianza con otros sectores, incluido el PRO, y propuso pensar en cómo pasar de un tercio ajustado como fue en las últimas elecciones a una mayoría más amplia”, para lo cual insta a “pensar en sumar dirigentes sociales y fuerte protagonismo a los intendentes, porque ese es nuestro gran capital hoy: más de 200 gobiernos locales, entre ellos Rosario y Santa Fe, los dos intendentes (Pablo Javkin y Emilio Jatón) tienen que jugar un rol muy importante”. Habló además de “pensar en dirigentes de la sociedad civil».
Radicalismo en estado de asamblea
Tras las declaraciones de Lifschitz, el radicalismo integrante del FPCyS encarnado en NEO y Libres, cavila cómo convencerlo de que sin su presencia como candidato a Senador nacional, el PRO de Federico Angelini – y porque no José Corral – engrosaría Juntos por el Cambio sumando más radicales a los que ya simpatizan con esa corriente; mientras que, suponen, si Miguel Lifschitz fuese candidato del “nuevo frente”, su sola presencia contendría a los actuales radicales y devolvería a los que en el 2019 se fueron con José Corral.
¿Qué haría Lifschitz?
Por lo pronto, como dejó en claro, no aceptar el PRO de Angelini y Corral en el armado del “nuevo frente”. Después, como buen ingeniero civil, con la argamasa que le presenten sus aliados para esa nueva construcción, analizar metódicamente sus chances de ganar o ganar la elección a Senador nacional, única opción posible de cara a repetir la gobernación en el 2023.