VILLA OCAMPO – OTRO CASO QUE CONMOCIONA A LA REGIÓN – María Leticia Virili es hermana de Gustavo Virili, ambos recibieron llamada telefónicas en las cual se les advirtió del supuesto secuestro y fueron obligados a depositar una suma de dinero que ascendió a $ 10.000.-Han hecho dos depósitos que fueron a una cuenta bancaria radicada en la provincia de Córdoba. No se descarta apoyo logístico local, en rigor de los datos íntimos con los que contaban. Los llamados provenían de una cárcel de la provincia de Córdoba.
María Leticia Virili relató la escalofriante experiencia vivida el día jueves luego de las 15:30 en la que despertada por un vecino asustado, que le acercara un teléfono indicándole que su hermano Gustavo había sufrido un accidente de tránsito y su estado era grave, terminó convirtiéndose en una extorsión.
Al recibir el llamado para interiorizarse de la información, en la línea le advierten que Gustavo fue secuestrado, que debe hacer un depósito urgente bajo la amenaza que lo matarían, incluso, escucharía la ejecución en el teléfono. “Me dijeron que no hable con nadie, que no avisara a la policía y no corte en ningún momento la comunicación, sino, debía atenerme a las consecuencias”, relató María.
Durante tres horas de instrucción, María fue recibiendo órdenes por medio de su teléfono. La obligaron a depositar $ 4.000.- en Tacuarendí y luego le dieron una dirección en la ciudad de Las Toscas, un pago fácil que resultó estar en la estación de servicio ubicada a la vera de la ruta. En el lugar no pudo hacer el segundo depósito y fue obligada, vía telefónica, a realizarlo en la ciudad de Villa Ocampo, donde llegó con un remis, porque le advirtieron que dejara su auto en la localidad de Tacuarendí, para despistar a la policía.
En tanto, su hermano Gustavo estaba trabajando en la empresa en la que desarrolla actividades diarias y al mismo tiempo, fue anoticiado del secuestro de su hermana María, por la misma gente. Un ardid que ante las amenazas y la urgencia de las instrucciones ninguno de los dos pudo advertir.
Todo el tiempo se le indicaba que se cruzara de vereda o que ingresara a un local para evitar sospechas y se le anoticiaba de que la policía la buscaba. Dato excluyente que advierte de un apoyo logístico local, mas allá de que la llamada se hiciera de una cárcel de la provincia de Córdoba.
“En un momento un empleado de su hermano la encuentra en la calle y la anoticia de que su hermano la está buscando por que se le informó que su hermana María estaba secuestrada. Ambos fueron engañados por la misma banda y al mismo tiempo. Ambos depósitos hechos asciende a la suma de $ 8.000 y sumando cargas virtuales a teléfonos que se le informaba, la cifra supera los $ 10.000.-
Fuente: Horizonte Noticias
