Este jueves se están cumpliendo 17 años del que fue el retiro definitivo de quien es considerado, por amplia mayoría, el mejor jugador de baloncesto de todos los tiempos.
El nombre de Michael Jordan figura con letras doradas en la historia de la NBA. Con su Chicago Bulls se coronó en múltiples y reiteradas ocasiones, propiciando que muchos niños de todo el mundo se acercaran a practicar este deporte, e imitar así a su ídolo.
A principios de los 90, los Toros tuvieron la difícil misión de romper la hegemonía vigente repartida entre Los Angeles Lakers y Boston Celtics. Respaldado por un equipo formidable, Jordan encaramó a su equipo en lo más alto, posicionándose también con varias distinciones personales, las que eran disputadas con la otra gran figura coincidente de la época: Magic Johnson.
En el medio de ello, se pudo dar el gran gusto de representar a Estados Unidos en un juego olímpico, ganando de forma brillante, la medalla de oro en Barcelona 1992.
En el mejor momento de su carrera sorprendió al mundo anunciando su retiro y, mayor aún fue la sorpresa, cuando en 1994 firmó contrato para jugar al béisbol de manera profesional en los Medias Blancas de Chicago.
Pero las anodinas campañas cumplidas en dicho interín por los Bulls, y su amor por el básquetbol, lo obligaron a regresar a la actividad que lo vio brillar, para ganar así un par de anillos más.
Finalmente en 1999 le dijo adiós definitivamente a Chicago, pero no al deporte…
En enero de 2000 se hizo cargo como el máximo exponente dirigencial de Washington Wizards, y el bichito volvió a picarle. En septiembre del año siguiente, y de manera inesperada, comunicó en una rueda de prensa su vuelta como jugador profesional en la institución que presidía por aquel entonces.
Este regreso estuvo muy alejado de las que fueron sus etapas más gloriosas. Con un contexto de conjunto que poco lo ayudó, y con casi ya 40 años de edad, cumplió un par de campañas mediocres con el equipo capitalino.
Finalmente, el 16 de abril de 2003, en la derrota de su elenco ante Philadelphia, Michel Jordan abandonó la actividad para siempre.
Por Roberto Suarez – el preliminar radio