Falta de garantías del suministro peligran las obras

GASODUCTO DEL NEA – En tanto la obra del Gasoducto del NEA había quedado totalmente fuera de la agenda oficial argentina y se promete sumar a la frustración energética de esta parte del país, el presidente de Bolivia Evo Morales acaba de sorprender acreditando chances al proyecto.En una reunión con su colega de Uruguay, Tabaré Vázquez, ofreció gas natural de Bolivia a Uruguay a través del futuro Gasoducto del Nordeste (GNEA) “en proceso de tendido”.

Morales visitó Montevideo, en busca de una salida al mar a través de los puertos uruguayos. Fue en esa circunstancia en que ambos mandatarios hablaron de la posibilidad de que Uruguay consuma fluido boliviano a través del GNEA.

La noticia sorprendió porque Argentina aun espera la garantía de suministro de los 27,7 millones de metros cúbicos por día (MCD) de gas natural boliviano y la certeza de un cronograma de entregas. También contrasta con el reciente exhorto del embajador de Argentina en La Paz, Horacio Macedo, quien declaró ante medios bolivianos que la construcción del GNEA depende de la certidumbre de que “Bolivia nos dé en los volúmenes, puesto que nosotros no podemos hacer un gasoducto de 1.500 millones de dólares para que después esté vacío”, ratificó el embajador en declaraciones realizadas. Macedo aseguró que el proyecto “está demorado, no está detenido”.

En Montevideo, Morales y Vázquez confirmaron “el interés en que los grupos técnicos continúen trabajando a fin de analizar la posibilidad de la venta de gas natural boliviano a Uruguay” a través de ese ducto.

De concretarse el acuerdo, y siempre y cuando Bolivia realice las inversiones para sacar el gas del subsuelo, el GNEA —o, mejor dicho, el ramal que proveería gas a Chaco, Formosa, Corrientes y Misiones— tendría mayor sustentabilidad, al incorporarse el consumo uruguayo.

Ambos mandatarios alcanzaron un principio de acuerdo para que el país andino, mediterráneo desde 1879, acceda al Atlántico por puertos uruguayos en condición de libre tránsito y almacenaje liberado, confirmaron fuentes oficiales.

Privada de sus costas al Océano Pacífico tras una guerra decimonónica con Chile, Bolivia patentó su interés en la utilización del sistema portuario uruguayo a través de Nueva Palmira (sobre el Río Uruguay) y Montevideo para movilizar la carga de su comercio exterior, de acuerdo con un comunicado conjunto divulgado por la cancillería uruguaya.

Vázquez y Morales acordaron la suscripción, a la brevedad, de un acuerdo bilateral para que Bolivia, que pone a punto un volumen sin antecedentes de exportaciones de hierro, utilice como propios los puertos de Palmira y Montevideo.

Fuente: Diario norte