EN LA GUARDIA DEL HOSPITAL CENTRAL DE RECONQUISTA – Los hechos de violencia que vienen ocurriendo en la Guardia del Hospital Central de Reconquista, preocupa a los trabajadores del nosocomio y a la Dirección del mismo, que busca garantizar las condiciones de seguridad e higiene de quienes desempeñan sus tareas en áreas donde reciben pacientes, en algunos casos desbordados.El fin de semana se registró un incidente en el Hospital protagonizado por un paciente que había ingresado al nosocomio para ser asistido, pero los casos de violencia hacia el personal de salud “no son esporádico”.
“Nosotros venimos preocupados desde hace mucho tiempo por la violencia que se está padeciendo, especialmente en la zona de la Guardia del Hospital Central”, indicó la doctora Norma Villa, jefa de la Guardia Médica del efector de salud, detallando que “no es un suceso esporádico, ya que frecuentemente está sucediendo esto, y va en aumento en cuanto a la agresividad. Han pegado a enfermeras, escupido al médico, a la enfermera, al policía. Es decir, cada vez vemos más gente que está enolizada, o con sustancias que no son legales, que llegan al Hospital y generan estos hechos de violencia”.
La profesional médica se pregunta “¿qué está sucediendo en la sociedad?”, porque ve en la Guardia que “en realidad no son hechos esporádicos, sino cada vez son más frecuente. Y esto está relacionado también con los accidentes de tránsitos. Llega la gente enolizada, drogada, pero también con accidente de tránsito ocasionado por estos factores. Es tal la agresividad que tienen, que hasta a los policías agraden; ellos que están para cuidarnos a nosotros”, remarcó.
Daños
Por otro lado, la licenciada Fabiana Magnago, Jefa de Enfermeras de la Guardia, manifestó que han roto “las puertas, un parante de suero, rompieron las camillas, rompieron las camas, te tiran todas las cosas al suelo. El fin de semana escupieron a un personal, hasta le pegaron una patada en el abdómen”.
“Todas las mañanas cuando nos reunimos hacer el informe de Guardia, pensamos qué podemos hacer, qué podemos armar para resguardar la salud nuestra, la de los pacientes, y los bienes que tenemos en custodia. El electrocardiograma, lo rompieron; o nos roban, nos sacan linternas, otoscopio”, relató.
Ambas profesionales de la salud coinciden en que “cinco años atrás no había estos hechos de violencia, e incluso ahora está colapsado con los accidentes de tránsitos”.
Y destacaron “el apoyo constante del director del Hospital, Roberto Ceballos, del Consejo, ellos nos escuchan, nos apoyan, mantienen reuniones con el Jefe de Policía, e incluso pusieron guardia policial adicional. Ellos están muy preocupados por nosotros, porque no hay manera de parar esta avalancha social. Ellos tampoco entiende, y entre todos no sabemos qué hacer. Hemos tenido charla con el 107, para ver si hacemos algo, si organizamos charlas, talleres en las escuelas. Estamos buscando a ver qué hacemos”, agregó Villa.
Enolizados
A la violencia se suman los casos de pacientes enolizados. “El lunes, a las 12,45, apareció un paciente ya enolizado que estaba tomando de las 10 de la mañana.
Después entró otro a las 13,30, y después entraron otros a partir de las 4 de la mañana del martes. Estamos en invierno, qué va a pasar en septiembre, octubre, noviembre, diciembre ¿Qué solución le damos a esto?”, se preguntó la doctora Villa.
“Por eso estamos preocupados de lo que pueda pasar más adelante”, sostuvo, y señaló que “acá pasamos de otras cuestiones, además de la salud, que tiene que ver con lo social que no se puede parar”.
“Esto es para preocuparse –agregó-, a parte hay que tener en cuenta que este Hospital es de base, que abarca de Florencia hasta Santa Fe. Acá a partir del viernes, sábado y domingo, vienen todos acá: Vera, Intiyaco, Villa Ocampo, Malabrigo, Romang. Gracias a Dios estamos bien, tenemos todo, guardia de médicos, de enfermeros, de mucamos, rayos, laboratorio, tocoginecólogo, cirujano, traumatólogo. Es decir, tenemos el servicio para brindar, pero tenemos que ver como organismo esta situación de violencia que se está dando”.
Replanteo
Los incidentes que están ocurriendo en el Hospital de Reconquista, suceden también en otro nosocomio de la provincia. “El gremio también está preocupado por esta situación, porque ellos ven el avance de lo que pasa en el Cullen, que allí los enfermeros de la guardia salieron a manifestarse por este tema, pidiendo solución. Y allí hicieron lo mismo que acá, pusieron más guardia. Yo creo que tenemos que replantearnos con la justicia cómo hacemos, porque algo está pasando”, reflexionó la Licenciada Magnago.
Con respecto a la Guardia, la profesional indicó que la misma “cuenta con dos jefas, que fue una idea de la doctora Villa y del doctor Ceballos, una en Cirugía y otra en la Guardia. Nosotros nos venimos a cualquier hora de la madrugada porque los chicos están desbordados. Ya nada alcanza, hasta el Director ha tenido que venir de madrugada a ayudarnos. Hemos tenido avalanchas terribles. Estamos muy preocupados”, insistió.
Finalmente, Magnago planteó que “las dos municipalidades, la de Reconquista y Avellaneda, van a tener que comprometerse con el tema de las ordenanzas. Yo, como Jefa de Enfermera de la Guardia del Hospital Central de Reconquista, pido especialmente que hagan cumplir las ordenanzas, de tránsito, el control de cascos, porque muchos de los que ingresan no lo tienen, como así también los controles de alcoholemia. Que se pongan de acuerdo y actúen en beneficio de la salud de la ciudadanía”.
