El Ministerio de Salud provincial, a través de la Dirección de Promoción y Prevención de la Salud y frente a las altas temperaturas y los anegamientos por las lluvias, recordó a la población y a los servicios de salud medidas preventivas ante la posible ocurrencia de accidentes por mordeduras de yarará (Bothrops alternatus) y picaduras de alacranes. Ambas pueden ser fatales: las primeras en toda la población; y, las segundas, fundamentalmente en niños, si no son abordadas y tratadas a tiempo.
PICADURAS
En el caso de las mordeduras de Yarará, los síntomas iniciales son: dolor intenso, marcas de la mordedura e hinchazón de la zona en la parte del cuerpo en donde se produjo.
“En caso de accidente se debe trasladar al paciente a una institución asistencial lo más rápido posible (dentro de las 6 horas), donde se le deberá realizar inmediatamente una evaluación clínica y un estudio de laboratorio. Si este se halla alterado, se confirma el caso y se debe proceder al diagnóstico de gravedad y el tratamiento específico con suero antiofídico”, explicó al respecto la responsable del área, Andrea Uboldi.
Luego, la funcionaria enumeró medidas básicas de prevención, como evitar las áreas riesgosas consideradas hábitat de los ofidios, utilizar vestimenta adecuada como botas altas (que cubran el tobillo y la pierna), pantalones, guantes de cuero grueso, etc., mantener libres de maleza las áreas alrededores de viviendas, fábricas, vías férreas, etc.
También remarcó no introducir las manos en huecos de árboles, cuevas, nidos o bajo las piedras y que se recomienda transitar las zonas de ofidios en compañía de perros.
“En caso de inundaciones estas medidas deben extremarse ya que las corrientes de agua suelen desplazar los ofidios de sus refugios naturales, exterminar roedores de viviendas, galpones y otros, para evitar la provisión de alimento”, remarcó.
También se aconseja “revisar cuidadosamente las ropas de campamentos, frazadas, botas y demás, previamente a su uso y evitar tocar con las manos las serpientes aunque parezcan muertas y, menos todavía, la boca”, dijo la funcionaria, agregando que en caso de “trasladar niños hacerlos sobre los hombros y no dormir en el suelo y a cielo abierto en zona de hábitat de ofidios”
PRIMEROS AUXILIOS
En materia de primeros auxilios, se indicó que se debe mantener al accidentado en reposo, acostado y tranquilo; aflojarle la ropa (cinturón, zapatos, etc.); lavar la herida con abundante agua y jabón; inmovilizar la zona de la herida y elevar el miembro a 45° (si fuese el sitio de la picadura); trasladar al accidentado a un centro asistencial lo antes posible (antes de 6 horas).
Lo que no se debe realizar es administrar bebidas alcohólicas o remedios caseros; lavar con kerosene, tabaco, amoníaco, entre otros; utilizar torniquetes o ligaduras de la zona; succionar la herida; realizar cortes, incisiones, quemaduras, cauterizaciones en el área de la mordedura; intentar recuperar el reptil; utilizar suero antiofídico sin la confirmación diagnóstica previa; aplicar el suero antiofídico por personas inexpertas o personal no médico; no aplicar corticoides (Decadrón), ni analgésicos al accidentado.
FRENTE A LA PRESENCIA DE ALACRANES
Los alacranes se encuentran durante todo el año pero se registra un aumento en esta época del año, sobretodo en noches de mucho calor.
El peligro de estas picaduras proviene del veneno que deja cuando una persona contacta accidentalmente con uno de ellos y que en los casos más extremos puede ser de suma gravedad.
Desde el Programa Provincial de Control de Zoonosis y Vectores recomiendan una serie de acciones a fin de evitar estos accidentes:
>> Evitar la posibilidad de contacto con un alacrán; mantener el hogar y alrededores libre de escombros, ladrillos, tejas, leña, maderas.
>> Tapar las grietas u orificios de los revoques de las paredes sobre todo si estas son de ladrillo hueco; selle las cámaras de las cloacas.
>> Colocar malla metálica tanto en las rejillas de las casas; utilice insecticidas que sean inocuos para los humanos, animales y plantas.
>> Si se encuentra uno en la casa, revisar la cama antes de acostarse; no dejar ropa en el suelo y si ello sucede sacudirla ante de utilizarla; revisar los zapatos sobre todo los de los niños antes de colocárselos.
CÓMO RECONOCERLOS
El Tityus Trivittatus es la especie que con más frecuencia se encuentra en la región y la más peligrosa. Presenta una cola con aguijón y púa, pinzas alargadas y el dorso con tres rayas longitudinales oscuras.
La longitud total en un ejemplar adulto de alacrán es entre 40 y 65 mm, generalmente de color amarillento o amarillo rojizo, con tres bandas oscuras longitudinales en su dorso, los ejemplares más jóvenes son de coloración más claras. Tienen cuatro pares de patas, un par de pinzas, y un par de quelíceros (apéndice prensor) entre aquellos.
Es un animal de hábitos nocturnos que permanece oculto durante el día, en el suelo o entre las cortezas de los árboles, es frecuente encontrarlos en lugares habitados por el hombre en sitios con maderas caídas, escombros, tejas, ladrillos, (ámbito peri domiciliario), pero además los encontramos dentro de las casas en grietas de paredes, pisos, zócalos, huecos de revestimiento de maderas, en desagües que conectan con cloacas, habitaciones y depósitos sin aireación, detrás de cuadros, bajo los muebles o entre la ropas y los zapatos.
SÍNTOMAS
El detalle de los síntomas que provoca el ataque, incluye dolor en el sitio de la picadura. En general es intenso (en los niños provoca llanto) y una variedad de signos y síntomas locales y generales que se expresan con diferentes grados de severidad, entre ellos: palidez, náuseas, vómitos, salivación excesiva, piel de gallina, palpitaciones. Por lo general frecuentemente sucede de noche. La población más afectada son los niños pequeños y la localización es en los miembros inferiores.