Un grupo de padres de alumnos del Colegio San José se reunieron con una autoridad del Ministerio de Educación y pidieron la expulsión del Colegio San José para quien partió en tres la mandíbula de un compañero a la salida de clase, luego de un largo tiempo de bullying en la misma escuela. Creen que el alumno víctima no debe soportar el mismo ámbito que su agresor, quien debería continuar en otro establecimiento.
El titular de la Dirección Provincial de Educación de Gestión Privada, Carlos Battaino, visitó la casa de Nacho, 15, quien continúa en reposo domiciliario luego de la operación por triple fractura de mandíbula, ahora con 18 tornillos y placas especiales, producto de la agresión que recibió de parte del compañero de su mismo curso que lo atacó a la salida del Colegio San José, en la misma esquina, este 15 de septiembre pasado de 2016.
Fue la ocasión que aprovechó un grupo de padres para autoconvocarse y hacerle personalmente el pedido para que el agresor no continúe en la misma escuela, considerando que la víctima no tiene que soportar continuar en el mismo ámbito de su agresor. “Queremos que cuando vuelva tenga garantizada la seguridad. Nacho se lamenta y dice por qué él que es la víctima está en casa sufriendo y el agresor la está pasando mejor que él. Toda la escuela sigue normal”, comentó.
El funcionario respondió que no estaba en condiciones de responder a ese pedido en el acto, pero que iba a elevar el planteo a nivel ministerial.
El padre de la víctima, Claudio Gimenez, agradeció la garantía que le dio el funcionario acerca de que su hijo no va a perder el año por las faltas, que van a arbitrar la manera para que Nacho continúe recibiendo la formación con clases particulares. Añadió que “hubo muchos reclamos, muchas preguntas sobre la forma de tratar estos temas en la escuela”.
En cuanto a la recuperación de Ignacio por la triple fractura de mandíbula, Claudio contó que aún le restan meses de recuperación, que habla pero se le entiende poco y solo ingiere líquidos. “Ayer intentó comer puré, algo sólido, pero en su cara se notaba el dolor”, detalló.
LA SUSPENSIÓN
Autoridades del colegio y del Ministerio de Educación, resolvieron la sanción para quien le provocó una triple fractura de mandíbula a Nacho, este joven de 15 años, en un violento ataque.
Las autoridades llegaron a un acuerdo y resolvieron la sanción al agresor. Ante el pedido de garantizar la seguridad de la víctima por parte de sus padres, se estableció la suspensión del atacante hasta fin de año y dejaron abiertas las puertas del colegio para que el joven golpeado regrese cuando reciba el alta.
La resolución firmada por funcionarios del Ministerio de Educación y autoridades del Colegio San José determina además que, el acusado recibirá el asesoramiento y asistencia pedagógica por parte de los profesores a través de actividades que permitan el cierre de calificaciones del 3º trimestre y la definición de la Calificación Final.
La resolución completa:
– A los catorce días del mes de octubre del año dos mil dieciséis y siendo las quince horas se reúnen en dependencias de la Escuela de Educación Secundaria Orientada Particular Incorporada Nº8023 “San José” de la localidad de Reconquista, el Jefe de Supervisores de Educación Secundaria y Educación Técnico Profesional –Prof César Fauric, la Supervisora de la Escuela-Prof. Sandra Verdún, la Sra. Silvia Lorenzón Representante Legal, la Prof María Luisa Suárez Directora y la Prof. Lelia López Vicedirectora de la institución antes mencionada.
– Se convoca en esta oportunidad a los padres del alumno agredido, Señora Gabriela Mereles y Señor Claudio Giménez a fin de informar lo resuelto con relación al hecho de violencia ocurrido el pasado 15 de septiembre fuera de la institución educativa entre dos alumnos y de la cual su hijo resultara gravemente lesionado con triple fractura de mandíbula.
– Al respecto corresponde señalar que las medidas acordadas con la institución escolar parten de considerar la gravedad del hecho ocurrido y la necesidad de preservar y contener a los menores involucrados siendo el ámbito educativo un espacio en el que debe privilegiarse el bienestar de los estudiantes como requisito indispensable para su formación, la resolución pacífica de los conflictos con intervenciones que pongan el acento en lo educativo más que en lo punitivo
– Al respecto resulta evidente que la escuela no está ajena a la cultura de violencia y contraviolencia que hoy prevalece en la sociedad en general y a la cual no escapan nuestros jóvenes. La tarea de educarlos en una cultura pacífica no es solo responsabilidad de la escuela sino tarea de todos, los padres como primeros y naturales educadores de sus hijos, la sociedad civil, la comunidad, las distintas organizaciones de la sociedad, el gobierno. Esta tarea constituye una responsabilidad colectiva permanente de todos estos actores dirigida a proteger el crecimiento y desarrollo de nuestros jóvenes como sujetos de derecho.
Es en este marco y de las circunstancias propias de la situación que motiva la presente actuación que se decide:
* Indicar una trayectoria escolar no presencial para el alumno que realizó la agresión por lo que resta del Ciclo Lectivo con el asesoramiento y asistencia pedagógica que se brinde por los profesores de cursos a través de actividades que permitan el cierre de calificaciones del 3º trimestre y la definición de la Calificación Final. Asimismo se dispondrá el apoyo de la Facilitadora de la Convivencia con el fin de garantizar el derecho a la educación que le asiste desde una trayectoria individual apropiada para particular circunstancia. Conforme lo disponga la institución escolar podrá convocarse al menor agresor en el horario de la tarde para apoyar y acompañar este proceso.
* Definir para el espacio curricular de “Formación Ciudadana e Identidad” del 3º año la continuidad del trabajo indicado por la institución con el alumno que realizó la agresión destinado a reflexionar sobre lo ocurrido y la necesidad de la resolución pacífica de los conflictos. Comprometer a los padres de la continuidad de la asistencia profesiones dirigido al bienestar del su hijo con el acompañamiento de los Facilitadores de la Convivencia de la escuela en todo aquello que resulte pertinente.
*Considerar la postergación del Campamento Educativo programado para los primeros días del mes de noviembre en virtud de no estar dadas las condiciones para su realización evaluando su ejecución para el año siguiente.
* Garantizar la atención del Servicio Domiciliario para José Ignacio a fin de dar continuidad a su proceso formativo sin perjudicar su condición de alumno regular durante el lapso que demande su recuperación.
* Promover la construcción de acuerdos consensuados de convivencia escolar con la participación activa de los distintos actores de la comunidad educativa en el marco del Anexo IV del Decreto Nº181/09.
* Dar formal intervención al equipo Socio-Educativo de la Delegación II de Educación a fin de acompañar el proceso.
* Evaluar la evolución de la situación a fines del presente año para definir los próximos pasos a seguir.
– Los padres del agredido manifiestan su preocupación por las secuelas que le puedan quedar ya que la fractura superior de la mandíbula puede acarrear consecuencias que se manifiesten en el tiempo según los profesionales que lo atienden le informan.
– Según informan los padres existieron desafíos en anteriores oportunidades de acuerdo a lo que el agredido les informó pero que se le comunicó a la escuela.
– La madre expresa que no se refirieron a esta situación como caso de Bullyng y que el episodio comenzó esa misma mañana durante las horas de teatro en que un tercer alumno molestaba a algunas alumnas en cuya situación su hijo salió en defensa e intervino el compañero que termó desafiándolo en la salida y le propinó un golpe de puño con las consecuencias sabidas.
– Gabriela pregunta como va a ser el seguimiento futuro de la evoluciuón de la situación a lo que se le responde que se realizará a través del equipo socioeducativo y Ministerio de Educación.
– Agrega su preocupación por la seguridad de su hijo frente a las derivaciones legales que pueda tener la situación.
Gustavo Raffín