Con las expresiones públicas en contra de las últimas horas de diferentes espacios, el frente Unidos necesitará apelar a los votos del sub bloque peronista Hacemos que conduce Omar Perotti, para conseguir los dos tercios que posibiliten aprobar con media sanción en Diputados la Ley de Necesidad de Reforma de la Constitución.
Por: Darío H. Schueri – Desde Santa Fe
Hoy el oficialismo Unidos cuenta con efectivamente 31 votos (suponiendo que Claudia Balagué del Frente Amplio por la Soberanía estuviese a favor) sobre el mágico número de figurativas 34 manos alzadas (el voto ahora es electrónico) que necesita para transformar en media sanción la Ley de necesidad de reforma de la constitución.
Por lo tanto, los tres – o cuatro – votos restantes para alcanzar los dos tercios deberá terminar de conseguirlo en el sub bloque peronista de cinco integrantes de Hacemos que conduce Omar Perotti, habida cuenta que los restantes cuatro justicialistas (Alejandra Rodenas, Miguel Rabbia, Lucia De Ponti y Verónica Baro Graf) votarán decididamente en contra. En esta columna ya habíamos señalado que Juan José Piedrabuena que ingresó al parlamento representando al peronismo, votará con el oficialismo.
En las últimas horas, los unipersonales Natalia Armas de Vida y Familia y Juan Argañaraz (Inspirar) definieron su posición contraria a la reforma de la Constitución, como desde luego Somos Vida de Amalia Granata.
De la misma manera votará en contra Carlos Del Frade del FAS.
El peronismo: ¿decididamente en contra?
Para quienes opinan que el documento del Partido Justicialista podría contener expresiones interpretativas que exculparían a quienes deseen votar junto al oficialismo, en principio la rápida lectura del escrito estaría reflejando una severidad discursiva que podría ser confusa y distractiva, toda vez que si bien acusa (al oficialismo) de “una avanzada autoritaria y de perpetuación en el poder que solo busca la auto reelección del actual Gobernador”, no es menos cierto que ninguna oración expresa oposición tajante a la reforma; más bien exigen “un diálogo democrático”.
¿Una puerta entreabierta?.
El pensamiento orgánico del peronismo santafesino fue rubricado también por los diputados de Hacemos Celia Arena, Marcos Corach y Walter Agosto, mientras que Omar Perotti y Sonia Martorano no lo hicieron por no haber asistido a la reunión.
Solo al momento de iniciarse la sesión (el jueves o viernes) se sabrá cuantos integrantes de Hacemos estarán dispuestos a interpretar el documento partidario para facilitarle al oficialismo los votos necesarios que permitan sancionar la ley de necesidad de reforma constitucional.
Unidos, más unidos que nunca
Con el documento del PJ en la mano, la decena de Partidos que integran el frente gobernante Unidos se reunieron en Rosario para redoblar la apuesta: “expresamos nuestra firma voluntad de avanzar en la tan necesaria reforma de la Constitución de la Provincia” encabezan su posición.
Y si de jugar fuerte se trataba, lo dejaron explicitado más adelante: “manifestamos la necesidad de plantear la reforma en conjunto con las elecciones intermedias con convencionales constituyentes que trabajen ad honorem”. Si bien no hablan de fecha, presuponemos que sería en el 2025.
Después el PRO por su cuenta también hizo un pronunciamiento similar para ratificar la contundencia de la posición oficialista.
Desde el socialismo, el vicejefe del bloque de diputados Rubén Galassi expresó contextualmente ante nuestra consulta periodística que “estamos en el mismo barco y con un único destino”.
Somos Vida: en contra desde siempre
Para disipar comentarios capciosos, el bloque de siete integrantes Somos Vida que preside Amalia Granata vio la necesidad de aclarar que están decididamente en contra, dejando en claro que “la reforma no es una urgencia ni una demanda de los santafesinos”, y que pretende sancionarse “en dos días y a libro cerrado, fruto de reuniones y acuerdos secretos”.
El “atajo Gramajo”
El senador por el Departamento 9 de Julio Raúl Gramajo (del bloque unipersonal Unite) que forma interbloque con Unidos, presentó hace un par de semanas su propio proyecto de ley de necesidad de reforma constitucional.
La idea era que la iniciativa del norteño oficie de “muleto” por si en Diputados no prosperara la discusión (hoy incierta tal como acabamos de reflejar) y utilizarla para, con los dos tercios del oficialismo senatorial, transformarla en media sanción.
Ahora bien: si el oficialismo consigue los dos tercios en diputados no habría necesidad de apelar al “atajo Gramajo”.