Esta semana se está cumpliendo un año de la apertura de la Oficina de ANSES Villa Ocampo, sin embargo, nada hay para festejar.
La oficina sufre un cierre de hecho y la millonaria infraestructura que se logró conseguir para esta región, hoy se presta a ser utilizada para “operativos”, esos que tantas veces se realizaron en el Centro de Jubilados con la sola presencia de una trafic y dos operadores (pareciera que nada ha cambiado).
Hace un año, al abrir sus puertas, ANSES Villa Ocampo comenzó a recibir no sólo a vecinos de la ciudad, sino también de las localidades de la región. En cuestión de días vecinos y vecinas de Florencia, Villa Guillermina, EL Rabón, Hardy, Las Toscas, San Antonio, Tacuarendí, Villa Ana, El Sombrerito, Arroyo Ceibal e Ingeniero Chanourdié, junto a residentes de nuestra ciudad, ocuparon las veredas y colmaron la oficina. Lo que durante tanto tiempo se reclamó, por fin se había conseguido.
ANSES Villa Ocampo registraba alrededor de 110 atenciones diarias, correspondientes a las decenas de trámites que se realizan por medio del organismo. A un año, solo recibe a 5 o 6 personas al día, atendiendo solo trámites relacionados al sector pasivo (y no todos).
El panorama, más que triste, es preocupante. La decisión del gobierno de Milei perjudica a más de 80 mil habitantes que ven como se les restringe, se limita, el acceso al derecho de la seguridad social.
No puede esto analizarse de manera aislada, el cierre de esta oficina debe verse en el marco de los miles de despidos de la administración pública mediante los cuales el gobierno de Milei concreta el llamado “achicamiento del Estado”. Y es necesario advertir que este achicamiento no se concreta únicamente mediante despidos, el cierre de organismos, el desfinanciamiento de la educación pública, la no entrega de medicamentos a pacientes oncológicos, entre otras, son medidas que llevan adelante el vaciamiento del Estado y la consecuente pérdida de derechos.
El cierre de las oficinas de ANSES se traduce en personas que no podrán acceder a su jubilación, que no podrán tramitar una pensión ni saber porqué dejó de cobrar el salario, un trabajador que no cobrará escolaridad o no podrá incluir a su hijo en la obra social, alguien que no tramitará su desempleo, un changarían que no podrá tener monotributo social y un estudiante que quedará sin el Progresar.
A un año de su inauguración, ANSES Villa Ocampo vive incertidumbre y, aunque se trate de tapar con un par de operativos, lo cierto es que la oficina está cerrada de hecho y miles de personas han perdido la posibilidad de ver garantizado su derecho a la seguridad social.
Milei y sus funcionarios no conocen nuestra región, no saben de los padecimientos de nuestra gente (lejos de justificarlo, esto lo hace más irresponsable aún al no conocer el país que debe gobernar), pero los concejales, los intendentes, los presidentes comunales, los diputados y senadores, el gobernador y los funcionarios provinciales sí que lo saben. Por eso, un mes que la oficina no funciona, seguimos denunciando su cierre de hecho y el consecuente cercenamiento de derechos en nuestra región e instamos a defender los derechos de nuestros conciudadanos. Ojalá pueda oír más de una voz peleando para que no se cierre ANSES Villa Ocampo. Hoy, a un año de su inauguración, solo hay silencios.
Gustavo Volkart – Belen Zoloaga (Concejales PJ)