El próximo sábado 13 de abril, recibiremos a nuestro Obispo que realizará el Acto de Reparación a la Eucaristía, en Capilla San Ramón Nonato.
Se rezará una sola Misa en todo el ámbito parroquial según el siguiente detalle:
– 17:00 hs: Caravana con el Santísimo Sacramento, partiendo del Templo y pasando por las calles de la ciudad de Villa Ocampo.
– 17:45 hs: Recepción del Santísimo Sacramento en Capilla San Ramón Nonato.
– 18:00 hs: Santa Misa en Capilla San Ramón Nonato, presidida por el Obispo Ángel José Macín en acto de reparación pública del daño espiritual provocado, y renovando nuestra adhesión más honda con Cristo Eucaristía.
Compartimos una breve parte de la carta del Obispo que envió a la comunidad el pasado 15 de marzo de 2024 tras el suceso en la Capilla San Ramon: “Como Padre y Pastor de la Iglesia Diocesana de Reconquista, quiero expresar mi cercanía a usted y a toda la comunidad parroquial, y de un modo especial a los fieles de la comunidad que han sufrido este triste evento.
Es cierto que vivimos un tiempo de muchas necesidades y de una inestabilidad socio-económica cada vez más aguda. Pero de ninguna manera esta crisis avala acciones de este tipo, que aportan poco y nada en resolver los problemas que puedan estar pasando algunas familias; por el contrario, desde una perspectiva cultural, son acciones simbólicas nocivas, que desprecian el alimento como Don de Dios que tiene que ser compartido desde la solidaridad. Muchos hemos recibido desde chicos la enseñanza de que el pan “no se tira”. Culturalmente, es esta una falta de respeto al sentido cultural del alimento.
Pero el aspecto más doloroso tiene que ver con lo sagrado, lo cultual. El echar por tierra el pan consagrado durante la celebración Eucarística es una profanación a la presencia de Cristo, quien quiso quedarse en el pan, para acompañarnos en nuestro camino hacia el banquete celestial. El “Pan del Cielo”, desparramado por tierra, es una ofensa a la fe de los fieles que semanalmente se reúnen para celebrar el memorial de la Cena del Señor y encuentran en el pan consagrado el alimento para el camino y el consuelo en sus luchas cotidianas. La intolerancia al sentir religioso de la gente es un mal que no debemos permitir que se instale entre nosotros.”
gentileza el ocampense
