Decreto revolucionario

El decreto cambia la vida de los argentinos. Esperamos que la justicia y el congreso no entorpezcan su funcionamiento. ¿Qué hacemos con los bonos y acciones?

Por Salvador Di Stefano

El decreto de desregulación que presentó el gobierno es una revolución para una economía argentina altamente regulada, al igual que el control de la calle por parte del Estado ante una movilización social. Con estos dos aciertos Javier Milei se gana un protagonismo inédito para un presidente en la Argentina.

¿Qué le falto al decreto? Permitir a los importadores pagar con dólares de mercado las importaciones, esto hubiera sido la frutilla del postre.

¿Qué dudas nos queda? La ley que deroga que ley deja vigente. Por ejemplo, se deroga la ley de alquileres, ¿Hay que sacar una nueva ley o cual queda vigente?

¿Qué sensación nos queda del decreto? Nuevos aires de libertad.

En el plano del congreso y la justicia, el gobierno deberá sortear muchas trabas que le pondrá la oposición, desde mi punto de vista el discurso del presidente debería ser más amigable con la oposición, aunque no miente cuando relata lo que sucedió en los últimos años. Hay que tener en cuenta que el decreto es muy bueno, pero debe pasar por el congreso.

En el día de ayer comenzó el gobierno parlamentario, a partir de aquí se necesita un congreso que acompañe, si no hay un acompañamiento esto trabara el accionar del nuevo gobierno, y esto impactara en los mercados.

En los últimos días hemos vista como los bonos llegaron a un techo, y parecería que no encuentran un gran volumen para poder superar máximos, para buscar nuevos picos necesitamos nuevas noticias. Se comenzó a hablar de la posibilidad de un crédito del FMI de U$S 15.000 millones, sería un golazo para comenzar a fortalecer el balance del Banco Central.

La licitación de deuda del día de ayer fue un verdadero éxito, sin embargo, las tasas no lucen atractivas, son negativas de alta magnitud. El que tiene excedente de pesos y quiere comprar bonos en pesos ajustados por inflación tendrá que convalidar tasas de interés muy negativas contra la inflación, lo que hace inviable la inversión. Si queres hacer un plazo fijo UVA los bancos te permiten hacerlo por un monto reducido, solo $ 1.000.000. Los bonos dólar Linked no son atractivos con un tipo de cambio que parecería que estará congelado, sin embargo, hoy es momento de comprar pensando el mediano plazo, el bono TV24 que vence en abril del año 2024 te permite adquirir el equivalente a dólar mayorista a $ 671, cuando en el mercado vale $ 800. Algo parecido sucede con los duales, hay que comprar cuando no son negocio, cuando se pongan atractivos los precios serán muy superiores.

Conclusión

. – El decreto es una revolución, y lo único que lo puede empañar es la acción de la justicia y el congreso, dos frentes que dejo abierto el presidente en su discurso.

. – Para los que tienen excedentes de pesos, no son atractivos los bonos en pesos ajustados por CER, los bonos atados al dólar linked son para el mediano plazo, los bonos soberanos en dólares lucen caros, la acción tiene un recorrido lateral, en resumen, el mercado de capitales no luce muy atractivo a estos precios.

. – La bolsa americana también está en un periodo de transición, se alzan voces que presagian una toma de ganancias, y eso no ayuda a los activos financieros locales.

. – Cuando todo parece complejo, comprar dólares por debajo de $ 1.000 luce muy atractivo, ya sea comprando dólares billetes u obligaciones negociables que tiene una renta del 8,0% anual.

. – Cuida tus ganancias, comenzó el gobierno parlamentario, el presidente no tiene mayorías en las cámaras, y esto puede entorpecer la puesta en marcha del plan económico, esto no puede llevar a una toma de ganancias en el mercado, hace más de una semana que advertimos que nadie se funde por tomar ganancias. De largo plazo, deja una cartera en bonos y acciones, nunca hay que estar ni totalmente líquido, ni totalmente comprado. Recordar que en enero los bonos soberanos pagan renta y los dólares para el pago estarían asegurado. Salir de activos financieros volátiles, quedarse en los más sólidos. El arte de la combinación justa.