El gremio del personal sanitario advierte que, ante la suba de internación de pacientes por coronavirus, en Rosario faltan enfermeras y personal no médico en efectores privados.
La escalada de la segunda ola de coronavirus puso en tensión al sistema de salud rosarino, especialmente al sector privado, que tiene una ocupación del alta en terapia intensiva. “La situación es crítica», señaló Marcelo Liparelli, Secretario General de Atsa Rosario y alertó que esta “se agrava con falta de personal si se disponen precisamente mas camas como se viene mencionando”.
El sistema privado de atención médica de Rosario está integrado por 18 sanatorios (Parque, ICR, Mujer, Güemes, Británico, Delta, Americano, Mapaci, Plaza, Laprida, Los Alerces, Italiano, Ipam, Español, HPR, Sanatorio Centro, de Niños, Sanatorio Norte). Este vio saturado y permanece en «una situación crítica» debido a la demanda de camas de terapia intensiva que osciló «entre el 90% y el 95% y llegó a una cifra similar de ocupación de los sectores de internación general», apuntó el dirigente gremial
En ese sentido advirtió que “la situación es crítica con el tema de disponibilidad de camas”, pero además «se agrava con falta de personal si se disponen precisamente más camas como se viene mencionando”.
Al respecto indicó que “tenemos discusiones” con el Ministerio de Salud y Educación provincial al señalar que “hacen falta sobre todo enfermeras y no se habilitan cursos y entonces la oferta que hay no cubre la demanda”,
“Si se ponen más camas, con qué personal capacitado se va a atender”, se preguntó Liparelli. “Hospitales y sanatorios están pidiendo mas personal porque no alcanza el recurso humano”, sentenció.
Asimismo, Atsa Rosario aclaró que no solo el sector enfermería sostiene la atención de pacientes en el sistema: “También están las mucamas, personal administrativo y técnico que corren los mismos riesgos”.
«Ahora el sector de enfermería está profesionalizado y eso hace que muchas veces tengan doble empleo tanto en el ámbito provincial, municipal o privado. La situación hace que los sueldos sean bajos, mas allá de la buena paritaria que se puede tener. Los salarios son siempre bajos y eso lleva también al agotamiento del personal”, subrayó.
Por el momento, el reclamo se elevó al Ministerio de Salud. Piden más cursos de enfermería y mejores condiciones laborales. “Se ha sacado el auxiliar de enfermería que ayudaba muchísimo y tampoco se habilita mas dependencias para que se haga el profesional, entonces cuando la parte pública absorbe al personal profesionalizado de la parte privada por diferentes motivos hace precisamente que el sector privado quedó diezmado de personal no médico, puntualmente enfermeras”, argumentó. “Hemos tenido sanatorios que han tenido a estudiantes”, concluyó Liparelli.
Fuente: rosarioplus.com