A exactamente un año de haber asumido como Gobernador Omar Perotti, la ensalzada “unidad en la diversidad” que le permitió al “piamontés de Rafaela” arribar a la Casa Gris, se desintegró como un castillo de arena, mostrando que se trataba de una corporación de caciques con ambiciones propias y recelos hacia el Gran Jefe: el Gobernador.
En Diputados las diferencias no se notan porque son una ostensible minoría – siete – entre los 28; pero allí cada cual hace su vida.
En cambio en senadores, donde el peronismo sigue conservando la mayoría partidaria (difícilmente numérica), el “affair” Traferri no hizo más que poner blanco sobre negro lo que desde hace un año ya se vislumbraba: una incipiente descomposición en la relación entre los senadores peronistas y el electo Primer Mandatario, cuando por unanimidad el 29 de Noviembre de 2019, la Cámara de Senadores votaba el presupuesto 2020 que debería ejecutar Omar Perotti, quien acusaba al por entonces Gobernador Lifschitz de “comprar voluntades” peronistas. Faltaban 12 días para que Perotti jure y ya afloraban las diferencias con sus propios senadores.
En realidad Miguel Lifschitz no había hecho ningún esfuerzo para que el peronismo acompañara el presupuesto 2020: los propios senadores peronistas le habían pedido por nota que lo enviase. Con excepción de su delfín Alcides Calvo y algún otro el resto, empezando por Traferri, desconfiaban de quien habían apoyado para que gobierne la Provincia.
Hoy Alcides Calvo, leal conciudadano del Gobernador, con los dos nuevos integrantes de la Cámara (Marcelo Lewandowsky y Marcos Castelló) y junto al veterano Ricardo Kaufmann armó el bloque “Lealtad”.
Armando Traferri, quien “a pesar de todo” hasta el miércoles pasado lideraba el por entonces mayoritario “bloque oficialista”, hoy liderará formalmente el bloque NES (Nuevo Espacio Santafesino) que ya era un sub sector dentro del oficialismo; mientras que los líberos Eduardo Rosconi y Cristina Berra (que estaban dentro del sub sector de Calvo) tendrán su propio espacio, para oficiar llegado el caso de oportuna bisagra, quitándole ese privilegio al radical Hugo Rasetto cuando en el peronismo “eran 12”.
De ahora en mas…
Con minoría en Diputados y senadores fragmentados, será una empinada cuesta para Omar Perotti transcurrir los tres años de mandato que le faltan (29 meses para el armado de listas a Gobernador) aunque al Gobernador le guste recordar que cuando fue Intendente de Rafaela durante tres períodos, la mayoría de las veces lo hizo con minoría en el Concejo municipal. Sospechamos que ahora la cuestión es un poco más compleja.
No hay mejor defensa que un buen ataque
Traferri se defendió y contraatacó ante los medios de las acusaciones judiciales que pesan (200 GB de memoria, tres mil páginas) en su contra, responsabilizando al Gobernador Perotti de todos sus males, para lo cual utilizó parabólicamente al Ministro de Seguridad Marcelo Saín.
Hizo delicadas acusaciones funcionales y políticas, y proclamó su inocencia ante los hechos que se le imputan, afirmando que forman parte de un “show” orquestado desde el Poder Ejecutivo provincial para amedrentarlo. Su abogado José Luis Vázquez utilizó una denuncia planteada ante Fiscalía por los diputados radicales Maximiliano Pullaro y Fabían Bastía, para enancarse en la polémica por la concesión del juego online para los casinos (que aprobó por decreto Perotti, a pesar de dictámenes en contra del Tribunal de Cuentas). «Eso es juego ilegal, ¿dónde están los fiscales ahí?», se preguntó el letrado.
El Senado tendrá la ultima palabra
Lo cierto es que los 200 GB de evidencias con las que los fiscales rosarinos Matías Edery y Luis Schiappa Pietra quieren llevar a Armando Traferri a declarar como imputado en una mega causa de juego clandestino, deberán ser estudiadas por la Comisión de Peticiones, Reglamento y Juicio Político de la Cámara de Senadores (que compone Traferri junto a Kaufmann (PJ), Rosconi (PJ), Borla (UCR), Enrico (UCR) y Baucero (PJ)) previo a que el Cuerpo, en sesión especial y con el voto de los dos tercios, defina si le quita la inmunidad parlamentaria a Traferri para que pueda presentarse a declarar y eventualmente ser imputado. No detenido llegado el caso; para ello deberá imitarse el mismo procedimiento descripto.
Pasará mucha agua debajo de los puentes de Santa Fe y Rosario antes de que este caso político-judicial comience a madurar. Mientras tanto, habrá fuego graneado en el peronismo santafesino.
Por nada, después que se conocieran las declaraciones del ex fiscal detenido Gustavo Ponce Asahad incriminando a Traferri el pasado viernes 4, al día siguiente en una quinta del Gran Rosario, media docena de dirigentes peronistas –entre ellos una mujer – compartieron tertulia con el Senador caído en desgracia.