Nueve de las mismas corresponden a unidades de terapia intensiva y diez a generales. “Es una premisa de este gobierno que nadie se quede sin atención”, afirmó el director provincial de Salud, Rodrigo Mediavilla.
El gobierno de la provincia de Santa Fe, a través del Ministerio de Salud, anunció este lunes la habilitación de 19 nuevas camas en el Hospital Modular de Granadero Baigorria, ampliando de esta manera la capacidad del efector público, que alcanzará un total de 21 camas críticas y 24 generales.
Al respecto, el director provincial de Salud, Rodrigo Mediavilla, aseguró que “es una premisa de este gobierno que nadie se quede sin atención. Esperamos que estas nuevas camas no sean necesarias, que su ocupación no sea inmediata, pero esto depende exclusivamente de nosotros”.
Y sumó: “Existe un incremento de contagios; hemos cruzado la línea de los mil diarios, y se encuentra en ascenso el nivel de demanda de atención del sistema de salud. Por eso, es necesario que sigamos resaltando la conciencia. Necesitamos que la ciudadanía entienda que es imperioso hacer caso a las medidas de aislamiento, ya que es la única vacuna que tenemos”.
TRABAJO ARTICULADO
En consonancia, el funcionario hizo hincapié en el trabajo articulado con el sector privado de salud. “Aquellos ciudadanos mutualizados demandarán servicios a los efectores privados. De todas maneras, si alguna obra social no respondiera, el sistema público va a estar disponible. Es una premisa de este gobierno; nadie va a quedarse sin ser atendido”.
Finalmente, Mediavilla se refirió al estado de los recursos humanos del sistema de salud: “El recurso físico, instrumental, no es un problema en la actualidad, pero sí tenemos una limitante en el recurso humano, porque es un recurso finito; nuestros médicos también se enferman y se demora mucho tiempo en recuperar a un terapista que se haya contagiado”.
Y concluyó: “Por eso estamos apelando a la readjudicación de funciones. La idea es poder contar con médicos que, si bien no sean intensivistas, tengan una especialidad afín a la emergentología, como el caso de los anestesistas, cirujanos generales y médicos clínicos, entre otros, que puedan ayudar a cubrir provisoriamente esas bajas”.