*Entre los efectos clínicos inmediatos, mediatos y los que se desconocen, al SARS-COv2 hay que agregarle otro singularmente dañino: la descomposición social. No tenemos registros de otras partes del mundo, pero en Argentina es devastador. *
Por: Darío H. Schueri – Desde Santa Fe
El COVID 19 está profundizando lo que nunca dejó de expandirse desde su inicio en el 2008 con la tumoral “125”, esto es la disolución de los vínculos sociales y familiares; ni hablar los políticos.
Para peores de males, los iluminados de siempre no tuvieron mejor iniciativa que significar en “distanciamiento social”, lo que técnicamente para prevenir el contagio con el virus es un “distanciamiento entre personas”, o medicamente “distanciamiento sanitario”.
El virus está entre y con nosotros
El malévolo SARS-Cov2 además del sistema respiratorio, afectó la razonabilidad de los gobernantes, y disparó entre la clase política lo que los neurocientìficos denominan “complejo reptiliano”, que podría desencadenar reflujos no calculados ni mucho menos manejados, toda vez que estamos convencidos que el virus se las ingenió para estar presente de manera asintomática, creemos en casi todas las personas, lo cual desorienta todos los cálculos y proyecciones científicas, llevando las cosas a un nivel de “razonable paranoia” autodestructiva. ¿Cómo persuadir a la población que ante el menor síntoma de malestar que pueda ser compatible con coronavirus se autoaisle preventivamente por 14 días?. Un delirio.
La médica Cocó Dorigo, del servicio de Clínica Médica del Hospital Iturraspe de esta capital, señaló que la culpa es del virus, no de las personas: “es un error ahora insistir con la culpa a la gente por lo que está pasando. La gente está cansada, hay que decirle que ahora hay que hacer el mejor esfuerzo para no colapsar» ilustró, avalando profesionalmente lo que ¿descabelladamente? venimos planteando periodísticamente en esta columna desde hace tiempo.
Cómo evitar la rebelión ciudadana
Los últimos decretos restrictivos del gobierno provincial fueron literalmente desobedecidos por la extenuada población alcanzada por los mismos, sobremanera el demolido sector comercial, cuyas representaciones orgánicas, FECECO por ejemplo, no fueron consultadas a la hora de tomar medidas.
Tal cual titulábamos nuestro escrito de hace una semana, hoy el SARS-COv2 deslegitimó a la clase gobernante. La vació de poder y respeto; lo cual resulta extremadamente peligroso. Si no se retoma el diálogo y el consenso, el virus provocará anarquía.
Todos contra todos
El presidente de la comisión de presupuesto y hacienda de Diputados Fabián Bastía, hizo notar que “el gobernador Perotti debiera gastar su energía en defender los intereses de Santa Fe, y aportar los fondos para solucionar los innumerables problemas de los santafesinos, dejando su rol de espectador aplaudiendo los logros fiscales de otra jurisdicción”, en torno del apoyo que la Provincia suscribió a la decisión presidencial de quitarle fondos coparticipables a la Capital Federal para redireccionarlos hacia la Provincia de Buenos Aires.
Omar Perotti respaldó la medida anunciada por el presidente Alberto Femández “para empezar a corregir los desequilibrios de un país concentrado”, manifestaron los gobernadores en el documento titulado “Reducir desigualdades para una Argentina Federal”.
Los diputados radicales presididos por Maximiliano Pullaro acordarán revisar puntillosamente todas las iniciativas enviadas por el Poder Ejecutivo, toda vez que aún no obtuvieron respuestas del pedido realizado el pasado 26 de junio al ministro de Economía Walter Agosto por los diputados del FPCyS, sobre el estado contable, financiero y operativo de la Provincia, y transferencias a municipios y comunas. Y básicamente el reclamo de casi 100 mil millones de pesos por la deuda por coparticipación que Nación mantiene con Santa Fe.
Sobre este punto, el Ministro de Gestión Pública Rubén Michlig supo retrucar señalando que aún no hay definición al respecto por parte de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, y se preguntó por qué el FPCyS no lo resolvió durante su gestión.
Inclusive, el propio Partido socialista había publicado hace más un mes una carta abierta al Gobernador solicitándole convocar al Consejo Económico y Social “para tratar la situación social y económica, así como ante el recrudecimiento de la inseguridad, aspectos que se han agravado por el impacto de la cuarentena”, decían.
Saín inexpugnable
En aquella solicitada, el socialismo le pedía al Poder Ejecutivo remitir al parlamento las leyes sobre reforma policial, que hoy el ministro de Seguridad Marcelo Saín acusa – a propios y extraños- de sabotearles, lo cual generó renovadas rispideces en el seno político del gobierno.
Estas declaraciones, sumadas a otras más personalizadas en la figura de un senador peronista – Armando Traferri – hicieron que una vez más los 19 senadores aprobaran en el recinto una resolución de rechazo y repudio, que a todas luces se advierte poco y nada dañan el fuselaje político del todopoderoso Ministro Saín, sabedor que el para algunos misterioso acuerdo sellado con el Gobernador al momento de su designación, lo blinda como a nadie en el gabinete (con excepción de Walter Agosto) y ante las arremetidas de la oposición y del propio peronismo.
¿Qué pasará con la policía santafesina y el arco gremial?
Saín desactivó un incipiente conflicto policial por salarios, que tal vez nunca hubiera tomado la fuerza de la Provincia de Buenos Aires, al anunciar la misma plataforma salarial suscripta por los gremios estatales UPCN y ATE, más un plus para el personal de calle de $ 7.000 y otros $ 4.000 en concepto de “tarjeta alimentaria”.
De todos modos, aún subyacen interrogantes: ¿a quiénes les tocará ese nuevo suplemento de $7.000 si los que ya cobran un suplemento están excluidos?; ¿esos suplementos entran en el cálculo jubilatorio?; ¿cómo se implementarán los $ 4.000 en concepto de “tarjeta alimentaria”?.
No sería un tema menor si la policía no llegare a estar del todo conforme con lo otorgado (no ofrecido); porque esta semana se sabrá qué actitudes tomarán los docentes y el poderoso gremio Luz y Fuerza, que por ahora va tras la normalización de la EPE (¿Mauricio Causi Presidente, Alberto Joaquín Vice?); FESTRAM tiene unas capilaridad territorial que la torna insondable.
Todos los gremios restantes no deberían tener más opción que aceptar lo ya firmado por los tutores ATE y UPCN.
Perotti y la caja “finita” (del adjetivo “limitado”)
Omar Perotti, pese a las denuncias de la oposición de superávits y plazos fijos, no está dispuesto a desembolsar más dinero en aumentos salariales. “El gobierno provincial tiene que abandonar un poco ese criterio fiscalista que tiene, que pretende tener un Estado solvente y una actividad privada que se va deteriorando en su capacidad de funcionamiento todos los días”, apuntó el jefe de los senadores radicales Felipe Michlig.
Quedan tres meses durísimos por delante. El SARS-COv2 también hace estragos en las billeteras; y la del Estado suele parecerse a bolsillo de payaso.