El objetivo es acompañar ese mes el proceso de los alumnos que no hayan podido acreditar los saberes desarrollados durante este ciclo lectivo.
Con un regreso a las aulas este año más que incierto, en la provincia las clases podrían comenzar a mitad de febrero para acompañar el proceso de aquellos alumnos del nivel primario o secundario que no hayan podido acreditar los saberes desarrollados durante este ciclo lectivo.
La medida forma parte de una serie de estrategias que el Ministerio de Educación de la provincia está evaluando para “bajar a las escuelas” las formas de promoción acordadas en el marco del Consejo Federal de Educación para este ciclo lectivo marcado por la pandemia de coronavirus.
La semana pasada, los ministros de todo el país consensuaron cómo será el final de este particular año académico, modificado por la crisis sanitaria y la suspensión de clases presenciales.
La nota más destacada fue la decisión de que ningún estudiante repita este año, formando una “unidad pedagógica” con el 2021 y dejando la definición de la promoción para marzo próximo.
Es decir, los niños, niñas y adolescentes comenzarán el 2021 en el grado o año siguiente al que cursaron este año. Pero no será una promoción automática, ya que tendrán hasta marzo para acreditar los saberes considerados prioritarios para cada nivel y modalidad. Es más, los estudiantes del séptimo de la primaria y de quinto o sexto de la secundaria, en el caso de las técnicas, tendrán que sortear una evaluación para pasar al nivel siguiente (ver aparte).
En el Ministerio de Educación provincial están estudiando los efectos de cómo se trasladarán estas decisiones al interior de las aulas y elaborando las circulares que permitirán ordenar estos últimos meses de clases.
“En la reunión del Consejo Federal se acordaron cuatro resoluciones: la reorganización pedagógica, la curricular, la evaluación y la creación de un programa (Acompañar, puentes de igualdad) para asistir a los alumnos en la etapa de retorno progresivo a las escuelas. Estamos estudiando cada una y los efectos que tendrán cuando lleguen a las escuelas”, indicó el secretario de Educación de la provincia de Santa Fe, Víctor Debloc.
El funcionario destacó que están pidiendo información a los supervisores sobre cómo se desarrolló el cursado de este año en la diversidad que representa el sistema educativo provincial.
Al mismo tiempo, se avanza en la priorización de los contenidos básicos para cada uno de los grados, dependiendo del nivel, la modalidad y la terminalidad de cada institución educativa.
Y se están preparando cuadernos pedagógicos específicos para primer grado de la primaria, séptimo del secundario y quinto año y sexto año del secundario.
Un nuevo escenario
Así como la pandemia vino de la mano de una nueva forma de desarrollar el ciclo lectivo, anclada en la virtualidad, el escenario epidemiológico de la provincia obliga a pensar estrategias para concluirlo.
“En principio, no hay que pensar en el final del ciclo lectivo, sino más bien en una continuidad entre el 2020 y el 2021. Los estudiantes van a poder acreditar sus saberes entre noviembre y marzo y quienes lo necesiten podrán tener lo que se llama una promoción acompañada, con actividades de apoyo y complementarias”, explicó el funcionario.
El contacto con estos alumnos, comenzará temprano. “En febrero, cuando los docentes terminan sus vacaciones retomarán el contacto y pensamos que las escuelas podrían abrir a mediados de febrero para esos niños”, explicó.
Debloc marcó las diferentes experiencias registradas en la provincia en relación al cursado a distancia. “Hubo alumnos muy conectados, que se han manejado en forma autónoma y han desarrollado los itinerarios previstos, y otros alumnos con un vínculo muy discontinuo”, apuntó y consideró que “en función del seguimiento de esas trayectorias” se podrá definir si los alumnos promueven en noviembre o en marzo del año próximo.
Fuente: La Capital