Hay quienes creen que hay pingüinos en el Ártico y osos en el Continente Antártico, lo cual no es cierto, pero hay personas que lo saben y no conocen el motivo, es por eso que publicamos esta nota.
La respuesta debería ser simple y concreta pero no lo es tanto.
La evolución de las especies determinó que no vivan osos polares (ursus maritimus) en la Antártida, ni pingüinos en el Polo Norte.
Los osos polares descienden del oso pardo europeo.
Durante años evolucionó hacia un oso (el oso polar) que podía soportar el clima polar.
La razón por la que no ha llegado al hemisferio sur es que en aquel entonces ya vivían osos grandes en todos los continentes y el oso polar (que hace millones de años era mucho mas grande que ahora de acuerdo a los registros fósiles) entonces habría estado compitiendo con ellos.
Por lo tanto la distribución geográfica ha quedado en el nicho ecológico donde viven actualmente.
Los trópicos terrestres actuaron como barreras naturales tanto para pingüinos como para osos polares.
Este es otro motivo importante por el que no pueden llegar o migrar a polos opuestos y por lo tanto quedan limitados a vivir en el hemisferio norte y en el hemisferio sur los pingüinos.
Respecto al pingüino es un ave y se piensa que tiene un ancestro en común con la familia de los pelícanos.
Se podría pensar que se han dividido y que cubren cada uno su nicho.
Además el pingüino procrea en lugares del hemisferio sur donde no hay predadores en tierra, como por ejemplo la Antártida e islas adyacentes.
En estos lugares no hay predadores en tierra, por lo que el pingüino ha podido evolucionar en cantidad y en distintas especies.
Hay otros lugares donde puede procrear en paz fuera de la Antártida, por ejemplo Nueva Zelanda, donde tampoco hay predadores en tierra.
El pingüino es un animal muy vulnerable ya que no sabe volar y además no soporta las corrientes de mar calientes por lo que sólo puede vivir en el hemisferio sur.
En ambos territorios (ártico y antártico) hace frío y hay hielo.
Ambos están rodeando a los polos.
Pero las tierras árticas y antárticas constituyen muy diferentes tipos de lugares.
La mayoría del Ártico es océano congelado, conectado a masas circundantes de la tierra.
Los osos pardos de los bosques europeos del hemisferio norte se dirigieron hacia el Ártico hace probablemente mucho tiempo.
A través de las eras geológicas, se adaptaron a su entorno y se transformaron por mecanismos de adaptación natural en osos polares blancos.
El territorio antártico, por otro lado es una masa terrestre rodeada por el océano.
Los pingüinos no podrían haber caminado hasta la Antártida.
Se piensa que los antepasados de los pingüinos de hoy, posiblemente hayan volado y puede ser que se hayan dirigido volado hacia la Antártida.
Los pingüinos no se adaptarían apropiadamente de ser «trasplantados al ártico.»
Esto es porque tienen requerimientos especiales para alimentarse y reproducirse.
Todos sus predadores naturales provienen del mar, los pingüinos serian muy vulnerables en el Ártico y de muy fácil captura para los predadores. (El Ártico es océano.)
Por otra parte, si se «trasplantaran» osos polares a la Antártida, podrían tener algunos problemas para la procreación las hembras.
Los osos polares se alimentarían muy bien de pingüinos y focas antárticas ya que estos nunca han conocido un depredador que atacara por tierra como el oso.
Debido al aumento de temperatura del planeta se ha pensado como medida de conservación, trasladar osos polares al territorio Antártico pero muchos científicos manifiestan que tal vez seria peor el cambio de hábitat.
Está en discusión.
Laura STEIMAN
Médica Veterinaria
ANÉCDOTA
Hace unos cuarenta años atrás, mientras personal seleccionado para integrar una Dotación Anual Antártica, estaba realizando el Curso Pre-Antártico un alumno le preguntó al profesor si en la Antártida había osos.
El profesor dijo que no y explicó el motivo.
Este alumno comentó que podrían llevar una pareja de osos, para que se integren al lugar.
Un año después este alumno, junto con otro de sus compañeros se encontraban en patrulla en la Antártida cumpliendo una misión, sin poder avanzar por la situación meteorológica, protegidos dentro de su carpa, con fuertes vientos, escasos de comida y otras vicisitudes que se viven en estos casos extremos.
El compañero del que había sugerido que lleven osos a la Antártida; mientras trataba de hacer un poco de agua con la nieve que estaba derritiendo, lo miro fijo y le dijo “Después de todo esto que estamos viviendo, te imaginas si aparecen los osos que se te ocurrió traer aquí…»
El silencio y el rugir del viento fue la respuesta.
UN ANTARTICO