La mayoría de los casos índices se corresponden con personas que viajaron a zonas de alta circulación comunitaria y el uso compartido del mate propagó el virus en las localidades.
Desde el Ministerio de Salud de Santa Fe vienen siguiendo con atención la trazabilidad de los nuevos contagios para actuar rápidamente sobre la zona afectada y determinar la causa de la propagación del virus en localidades pequeñas y de pocos habitantes.
El más notorio fue el de Carreras, en el departamento de General López donde se detectaron 56 contagios en una localidad que no llega a los dos mil habitantes y donde el virus había ingresado a través de un transportista que lo transmitió a su entorno familia que hacían vida social con mateada incluida.
La popular bebida social, según la Ministra de Salud Sonia Martorano, fue la causa de los nuevos positivos en las últimas semanas en la pequeña comuna. Un foco que se trasladó a la región gracias a la tradicional costumbre de «compartir un mate».
Algo parecido ocurrió en Bombal, Los Quirquinchos y Villada, Elortondo y Wheelwright. Todos juntos, han sumado 70 casos y la gran mayoría de ellos tuvieron el mismo eje de contagio y desde la cartera de Salud consideraron que se debió al «relajamiento de la población».
En consecuencia, Santa Fe restringió los encuentros sociales que se limitarán a los días sábados y domingos exclusivamente.
Carreras quedó prácticamente aislada donde el ingreso y egreso es celosamente controlado. Desde la detección del caso índice, los comerciantes incluso han profundizado al extremo sus medidas precautorias; ni hablar de los transportistas de carga, a los que muchos estigmatizan como los grandes vectores del virus que hoy azota a esta tranquila localidad a la vera de la ruta 90, en el departamento Gral. López, a 120 kilómetros de Rosario.
«Hemos subestimado la potencia del virus, de los contagios y de la propia posibilidad de autocuidado de los vecinos», se lamenta un dirigente político referente en la región, que secunda el ranking con más positivos: 92 pacientes. Hasta el dinero en papel se guarda hasta nuevo aviso: prefieren mantenerlo en «aislamiento» por varios días, ante el riesgo de haber sido tocado por alguien que, sin saberlo, pudiera encontrarse afectado por «el corona».
Aunque con la holgura de no haber sido establecida como una zona de circulación comunitaria del virus, Santa Fe subsiste casi como una isla en medio de cuatro jurisdicciones con fuerte presencia del covid-19: AMBA, Chaco, Entre Ríos y Córdoba. Sin embargo, a través de una videoconferencia conjunta entre el Gobernador Perotti, la Ministra de Salud, el Ministro Rubén Michlig y los intendentes, la cantidad de incumplimientos frente a las medidas de flexibilización y el fuerte incremento de los casos obliga a tomar medidas de nuevas restricciones.
El exceso en la cantidad de participantes en las reuniones sociales, la falta de distanciamiento social y la ausencia de tapabocas sociales obligatorios fueron moneda corriente en las redes sociales en las últimas semanas, incluso con algunas denuncias a jóvenes y adolescentes involucrados en «fiestas clandestinas». De allí que el Secretario de Salud de la Provincia, Jorge Prieto, justificara esta decisión en nombre del gobierno provincial, bajo la premisa de mantener a raya una curva de contagios claramente ascendente y de la cual no se conoce aún cuál será el pico.
Con 422 contagios confirmados en la Provincia según el último reporte epidemiológico, dos de ellos este martes, en Venado Tuerto siguen de cerca el nexo epidemiológico de los 15 hisopados positivos que tuvieron como transmisor a un médico oriundo de Pergamino, que terminó siendo el caso cero de este nuevo brote.
En tanto, la comuna de Desvío Arijón y la ciudad de Coronda continúan cumpliendo el regreso a la fase 3 (no hay actividades deportivas ni locales gastronómicos), por diez días más, luego de un caso confirmado días atrás.
Rosario y Villa Ocampo registraron un caso cada uno en las últimas 48 horas, en tanto la capital de la Provincia no contabilizó ningún nuevo paciente en los últimos cuatro días y según las autoridades de los nosocomios públicos, la atención con camas críticas se encuentra «garantizada» incluso para recibir a los pacientes del centro norte provincial.
Mientras tanto, se han profundizado los controles a través del Plan Detectar en barrios populares y periféricos, con casos negativos y solamente 3 en estudio.
Fuente: lapoliticaonline.com
