La comunidad de Villa Ocampo festeja con su feligreses al cumplirse, el pasado 14 de abril, dos años de la inauguración del oratorio de nuestra señora de Itatí en el acceso principal de la ciudad.
«Como comunidad Ocampense estamos celebrando dos años de las reformas del oratorio de Nuestra Señora de Itatí, ubicado en el acceso de nuestra ciudad, siendo un lugar de oración, de rezar el rosario y donde se llevan ofrendas de flores», expresaron desde la Parroquia Inmaculada Concepción Villa Ocampo.
Conozcamos como se remodeló el oratorio:
El grupo coordinador de encuentro de matrimonios y parejas, había tomado la iniciativa de mantener el oratorio de la Virgen de Itatí, situado en el acceso de nuestra ciudad. Con el trascurso del tiempo y a pesar de haberse realizados algunos arreglos vieron la necesidad que el mismo, sea renovado.
Frente a esta inquietud, fueron hablar con el Padre Tomás Spanghero, en ese momento era el párroco, quien reflexionó sobre la importancia de tener un oratorio a la entrada de la ciudad y haciendo una comparación con una casa de familia él decía: “Al entrar a nuestras casas tenemos un espacio, un ambiente que es de recepción donde hay fotos e imágenes. Qué lindo que a la entrada de la ciudad podamos tener a María, recibiéndonos a todos, el oratorio está siendo esa referencia para los cristianos de Villa Ocampo”.
Después de tener el visto bueno del Párroco y del Consejo, llegó el momento de darle forma al proyecto y se hizo la consulta a un profesional idóneo para el correspondiente asesoramiento. En el 2015, Miguel Ramos llevó la iniciativa y todo lo pensado con el grupo a la Arq. Gisela Peloso y comenzaron a diagramar juntos.
Una de las cosas que se tenía que tener en cuenta para la remodelación, era que la zona donde estaba el oratorio, era propensa a inundaciones. La intención que se tuvo desde un comienzo fue realizar la réplica de la cúpula de la Basílica de Itatí. Conversando un poco el diseño y la reubicación, se pensó en generar un espacio en torno al oratorio, también en elevar el terreno.
La ubicación del oratorio es privilegiada en todo lo que es el acceso a la ciudad. El diseño y el sueño que se tenía se logró plasmar y hoy es una belleza del lugar, donde las personas de la ciudad y todo aquel que pase o circule por la ruta, eleva una plegaria en la imagen de la Virgen de Itatí.