Estamos aislados de casi todo hace varios días, de amigos, familia, escuela, trabajo, y de todo lo que hacía nuestra “vida normal”.
CORONAVIRUS o COVID 19 se llama la causa de la pandemia que provoca este aislamiento mundial y con miedo solo visto en las películas. Hubo otras pandemias que algunos recordarán la del 2004 por la gripe aviar no llegó a la argentina, la del 2009/2010 por la gripe porcina (N1H1) ó gripe A que lograron poner en alerta a nuestro sistema de salud, también existieron otras pero de esto hace mucho tiempo como los virus de la viruela y sarampión, la peste bubónica que cobraron muchas vidas.
El coronavirus, del cual la mayoría estamos cansados de oírlo, genera diferente situaciones y comportamientos que van desde lo racional hasta lo más absurdo: ¡ mirá aquellas personas tomando mate afuera!; ¡cuántas personas dentro del supermercado!; ¡qué fantástico, va solo dentro del auto con ventanillas cerradas y con barbijo! Y así se pueden describir cientos de comentarios. Lo cierto es que la mayoría no sabe bien que hacer y son pocas las medidas que claramente benefician, también es cierto que nunca hemos vivido semejante situación, y cada uno hace lo que le demuestra mayor seguridad.
Está claro que el AISLAMIENTO es beneficioso y se demuestra cuando vemos que la progresión de la infección en nuestro país tiene una escalada menor que en otros países como Brasil, Chile y Ecuador que no tuvieron la misma conducta de aislamiento inicial. Este método no es difícil de hacer, pero parece más difícil de cumplir cada día que pasa.
Los SISTEMAS DE BARRERA son otras de las medidas que está demostrado el beneficio, y con esto me refiero “toda aquella barrera que impida el ingreso del virus a nuestro cuerpo”, como son los guantes, barbijos, protectores oculares o anteojos, guardapolvos, como los más conocidos.
En cuanto a estas medidas debemos utilizarlas con el mejor criterio posible. Barbijos: es una eterna discusión entre personal de salud de cómo usar el barbijo, lo importante es saber que donde hay mucha gente en espacios chicos o ambientes cerrados, no sabemos la condición de salud de todos ellos y quizás por el tiempo que estamos en el mismo lugar sería bueno usar barbijos, lo que dificultaría la entrada por la boca o nariz del virus (la vía de contagio más frecuente).
Guantes: siempre fueron de ayuda para impedir contaminar de infecciones, cuando sabemos que tocamos cosas o superficies contaminadas y su uso en más efectivo en el personal más expuesto a ese tipo de superficies, en el común de las personas con un correcto lavado de manos con agua y jabón ya soluciona el inconveniente. Protectores oculares solo de uso ante personas con mucha tos y generalmente se deja para los trabajadores de salud quienes son las que cuidan de estos problemas al igual que el guardapolvo.
Lo cierto es que por nuestra zona hasta el momento no logramos detectar circulación del virus, esto nos habla de que los sistemas utilizados demuestran ser efectivos, probablemente sea cuestión de tiempo o probablemente nuestros cuidados nos permita ser una de las pocas regiones que no se ha detectado el virus. Es como una novela sin terminar, lo bueno es que todos somos actores principales y responsables de la propagación de la enfermedad. Y lo mejor de todo es que no es difícil lograrlo.
Seguiremos haciendo nuestro trabajo de higiene y cuidados por nuestra familia, amigos, maestros, compañeros de escuela y trabajo, para volver lo antes posible a la vida normal.