«Nos duele ver desaparecer a nuestra cuenca cañera», expresó el productor tosquense.
«Mi bisabuelo llegó de Italia en el año 1.900 y sembró los primeros 32 liños de caña de azúcar que indujo al resto de la familia a continuar con esa tradición, que hasta nos parece un vicio; continuó mi abuelo, mi padre, yo, mis hijos, en total cinco generaciones que nos dedicamos siempre a la siembra y cosecha de este noble producto que nos da la tierra, comenzó diciendo el productor cañero.
Y agregó: «Hoy la cuenca cañera está en terapia intensiva casi terminal, los médicos que podrían salvarlo están enfermos o directamente lo ignoran; hay dirigentes políticos que no son claros, a nosotros nos dicen una cosa y después resuelven otra cosa totalmente distinta; quienes dicen representarnos están en contra total de la cuenca cañera, hay algunos que ni siquiera han chupado caña en su vida, no sólo que no son productores, sino que, si conocen la caña es de lejos, cuando pasan por la ruta, por lo tanto esas personas jamás pueden entender lo que siente un productor cañero».
A su vez, continuó diciendo: «La ministra de la Producción de la provincia de Santa Fe, emite una resolución destinada a la mesa azucarera del norte santafesino, donde autoriza que se distribuya los fondos existentes, que han sido entregado en el mes de Julio del año 2016 para los productores cañeros, en un monto de casi 20 millones de pesos, hoy queda algo más de cinco millones de pesos depositados en el Nuevo Banco Santa Fe, erogando intereses de más de 50% anual que uno no sabe dónde va a parar, y quienes están al frente de la institución mesa azucarera, ponen decenas de trabas para que quienes intentamos acogernos a ese beneficio que otorga nuestro gobierno provincial no lo podamos obtener porque ellos dicen además, que están para administrar como corresponde los intereses de los capitales públicos y no para promocionar la siembra de caña de azúcar. Me lo dijo el señor Stechina, representante de la Unión Agrícola de Avellaneda y dirigente de la mesa azucarera, delante de 18 productores y del mismo presidente de la institución, señor Claudio Cremona; y nosotros tenemos que aguantarnos esos insultos e improperios de quienes se arrogan el derecho de ser nuestros representantes.
«Además de eso quién tiene a cargo el ingenio azucarero, está desojando margaritas, un día dice que hará funcionar la planta fabril, en otra reunión dice que no tiene recursos económicos para comenzar la cosecha. Es visible y de público conocimiento que gran parte del ingenio todavía está en el suelo; para armar todo lo que falta, le llevaría por lo menos entre 20 y 30 días trabajando sin parar y mucha gente capacitada, no cuatro personas como lo están haciendo ahora; además hay que tener en cuenta que ya desperdiciamos los mejores meses del año, que son julio y agosto para levantar la caña, a partir de mediados de setiembre, el clima es distinto y comienza a llover continuamente, por lo tanto no habrá piso para que ingresen las máquinas», agregó.
«La situación es totalmente desfavorable para todos y es como si estuviéramos conformes con lo que está pasando. No hay reacción colectiva de los integrantes de la cuenca cañera ante este difícil panorama, es como si estuviéramos anestesiados, lo veo trabajar muy bien al padre Carlos, lo veo haciendo esfuerzos de gestión política al intendente Chamorro, elevo mi voz, pataleo, discuto, pero es como si estuviéramos luchando contra los molinos de viento», concluyó Jorge Cassali.
Gentileza Antonio Avalos