El ingenio azucarero Las Toscas tiene nuevos propietarios y realizará la zafra 2018, que podría comenzar en unos 40 días, dándole una nueva esperanza de vida a la cuenca cañera santafesina.
Un mes atrás, prácticamente había quedado descartada la posibilidad de moler las 40.000 toneladas de caña que hay en el campo (unas 2.000 hectáreas), tras declararse desierto el remate de las instalaciones en el marco de la quiebra de la firma propietaria, situación que hubiese puesto en riesgo la continuidad de la actividad azucarera en la provincia.
La novedad se conoció el lunes, con la aprobación del juez Jorge S. Sicoli (Juzgado Nacional de 1º lnst. en lo Comercial Nº 3) de una “oferta de compra” de las instalaciones por parte de “Las Toscas S.A.”, asociación (en formación) entre Juan Orlando, María Amelia y Érica Fabiana Del Fabro y 18 obreros del ingenio, en la causa por la quiebra de la empresa Masaro S.A.
“Para la zona es una noticia buena porque es una luz de esperanza para algo que ya se daba por muerto, que es la cuenca cañera; y hoy estamos en condiciones de hacer zafra y replantear la actividad”, dijo a Campolitoral el asesor legal del Sindicato de Obreros de la Industria del Azúcar Las Toscas, Dr. Martín Deltin, tras la decisión del magistrado.
La Sociedad Anónima tiene una participación del 44% de los trabajadores y, según consta en el acta de aprobación de la oferta de compra, firmaron con Del Fabro un acuerdo con la finalidad de “la puesta en marcha en forma inmediata de la planta fabril, la realización de la zafra del corriente año y la incorporación de trabajadores”.
La resolución judicial indica, además, que la realización de la zafra 2018 “aseguraría no solo que los trabajadores permanentes y los transitorios vuelvan a adquirir su fuente de trabajo sino que, además, atenuaría el impacto social que esta quiebra genera en la comunidad de Las Toscas que depende económicamente y en gran medida de la zafra de este año”.
Deltin explicó que “esa oferta fue considerada válida por el juzgado por el gran contenido social que tiene”, aspecto que no estaba contemplado en los términos de la subasta. “Era un bien que podía ser destinado a cualquier aplicación”, por ejemplo de desguace.
La oferta de compra se hizo por $ 12,5 millones, que desembolsará Del Fabro, quien tiene una acreencia hipotecaria con Masaro S.A. por $ 9,8 millones. En la sociedad, el aporte de los obreros es simbólico, ya que se comprometieron a “que los créditos laborales que pudieran quedar en la quiebra, que hoy no tiene fondos, pero podría tenerlos más adelante, ellos los cederían a la S.A.”, explicó Deltin.
Vale decir que la firma Romelio H. Snaider, que operó el ingenio hasta febrero y fue obligada a dejarlo por una deuda de $ 2 millones en concepto de alquiler, indemnizó a los trabajadores, quienes sin embargo podrían reclamar otras compensaciones previas al ciclo de Snaider. “Esos créditos son simbólicos porque hoy son intangibles, son una manera de justificar la participación societaria”, detalló el abogado.
El asesor del sindicato consideró “innovadora” la propuesta y refirió que los obreros “tienen obviamente sus dudas sobre cómo van a hacer para funcionar, pero están entusiasmados” porque vuelven a tener una “chance” laboral.
De todas maneras reconoció la existencia de una crisis estructural. “No deja de estar golpeada la cuenca; este es un inicio”, advirtió. Y comentó que mantuvieron “algunos compromisos verbales del Ministro de la Producción y gente cercana al gobernador; y ahora que se logró al propiedad nos vamos a sentar a hablar para ver cómo fortalecer toda la cuenca para que el día de mañana haya azúcar y se pueda reabrir el ingenio Villa Ocampo” (que también adquirió Del Fabro).
En cuanto al plan de zafra, Deltin reconoció: “estamos muy justos con la fecha”; y estimó entre 30 y 40 la cantidad de días de alistamiento de las instalaciones. Además -agregó- de reactivar el diálogo con los productores, por lo que están diseñando una agenda de trabajo “para ajustar bien qué se va a plantear”.
Fuente: Diario El Litoral