Después de 20 años, no hubo justicia para uno de los asesinatos más atroces de la zona. El asesinato de Carmen Mabel Encina sigue reclamando por una Justicia aún indiferente. Por Analí Macuglia.
Tenía 5 años, era chica pero me acuerdo bien de la conversación en la mesa, esa mesa larga de familia de pueblo, católica, machista, pero muy divertida.
Recuerdo a mi abuela escucharla decir: “dicen que fue un carnicero. Ya veo es el de la esquina”, casi en chiste pero con preocupación.
Mi abuela me miró. Seguramente mi inocente asombro llamó su atención. Buscó plata en su bolsillo, me la dio en la mano diciéndome: “andá a la esquina de Pereto y comprá carne molida para hacer unas hamburguesas. Y ojo con el carnicero”. Especie extraña de sadismo familiar aceptado.
La casa de mi abuela queda en Las Toscas, por lo tanto muy cerca de la ciudad de Villa Ocampo y otros pueblos cercanos, de esos olvidados por las grandes ciudades y los grandes medios de comunicación. Los fantasmas de las rutas.
El 7 de marzo, pero de 1998, Carmen Mabel Encina, una chica de 19 del barrio Juan Perón de Villa Ocampo sale a bailar, pero no vuelve a dormir. Pasan dos días y sigue sin aparecer. Ese primer fin de semana de marzo llovió bastante, y como me dijo una vez Mary Pilón: “es como si el río no quiso ser cómplice”.
El 10 de junio de 2014, la Cámara de Apelaciones Civil, Comercial y Laboral del Distrito 4 Reconquista, integrada por los doctores Dalla Fontana, Chapero y Casella, dictó sentencia en el crimen de Carmen Encina resolviendo declarar la prescripción de la acción penal y en consecuencia, sobreseer a Ramón Andrés López, Héctor Alcides Espíndola, Daniel Alberto Espíndola y Ángel Armando Cabrera.
Como se recordará, hubo una sentencia condenatoria en 1ª instancia del Conjuez García que fue anulada por la Cámara. Le siguió una segunda absolutoria del Juzgado Civil de Vera –Doctor Di Pietro-. La tercera sentencia condenatoria de 20 años de prisión a los acusados, dictada en apelación por la Excma. Cámara de Apelación Penal de Vera, fue anulada por la Suprema Corte de la Nación por entender inconstitucional el sistema procesal penal de Santa Fe.
Este 7 de marzo de 2018 se cumplen 20 años del atroz FEMICIDIO a Carmen Encina. Sí, femicidio. En este entonces este tipo de crimen no tenía nombre y gracias a la lucha de todas las mujeres organizadas, a la lucha feminista hoy se logró el término legal.
“Mi teoría es que hicieron eso para encubrir una violación; Carmen se les murió por algo y no supieron qué hacer con el cuerpo”, remarcó en esos tiempos el fiscal que llevó adelante la causa Dr. Fessia.
A Carmen la violaron y descuartizaron, la asesinaron por ser mujer, por elegir cómo querer vivir. Y aun hoy se sigue revictimizando a las víctimas, exponiendo sus intimidades, poniendo la lupa en su forma de vida en vez de hacerlo con los culpables, con los machos asesinos. Eso se llama PATRIARCADO amigos. En lo que va del 2018, cada 28 horas muere una mujer en Argentina, asesinada por el sólo hecho de ser mujer. Y la sociedad, y los medios, y la Justicia forma parte de ese patriarcado.
Tenía 19 años. Fue olvidada por la Justicia pero no por las mujeres que hicieron tantas marchas y ruido para que el nombre Carmen Encina siga siendo escuchado.
En las calles Santa Fe y Mitre del Barrio Juan Perón de Villa Ocampo se concentra el pueblo para no olvidarla. Para no olvidar a todas las mujeres violadas, golpeadas, asesinadas y desaparecidas, como sucede hoy con Rosalía Jara en Fortín Olmos, como sucede con miles en todas partes.
A 20 años del femicidio de Carmen Mabel Encina, no olvidamos, seguimos pidiendo justicia y decimos basta de impunidad.