Las montañas de Esquel, sobre 50 o 60 centímetros de nieve

Una sensación divina y de libertad. Así podría definirse el descenso a cien kilómetros por hora, en las montañas de Esquel, sobre 50 o 60 centímetros de nieve recién caída. Flotando, como si los pies se deslizaran sobre el aire mismo, sobre la inmensidad que brinda el colchón de plumas blancas que amortigua la bajada. Nieve virgen, nieve seca, nieve fría; nieve con poca humedad. Nieve que cae y se mantiene durante varios días con buena calidad. Y de manera natural. Así es la nieve del Centro de Actividades de Montaña La Hoya.

Ubicado a 12 kilómetros de Esquel, en Chubut, e inaugurado en 1974, el Centro de Actividades de Montaña La Hoya cuenta actualmente con 30 pistas para practicar esquí y snowboard. Está equipado con once medios de elevación, entre los que los visitantes suelen destacar la aerosilla cuádruple “Las Lengas”.

Cuenta la historia que fue precisamente la Telesilla del Bosque, antiguamente conocida como Silla I, la que dio origen al CAM La Hoya en 1974. A esta telesilla, tiempo después se sumó el hoy muy concurrido T-Bar.

En aquellos primeros días, predominaba el esquí como deporte de montaña. Al poco tiempo, el snowboard iba a irrumpir rebelde como su contrapunto en la nieve. Cuatro décadas después, ese contraste se diluye en la complementariedad que el esquí y el snowboard construyen día tras día en el paraíso andino patagónico que representa La Hoya.

Pistas para snowboarders y el Snow Park

La Hoya es muy atractiva a la hora de elegir un destino de nieve, dado que puede albergar a principiantes en los deportes invernales, como también a avanzados y profesionales.

La pendiente máxima que tiene La Hoya, cuenta con un desnivel de 645 metros y la cumbre llega a los 2075 sobre el nivel del mar. Para los deportistas de nieve, es un deleite que la inclinación máxima alcance los 60 grados con una longitud esquiable de 14 kilómetros. Se pueden alcanzar los 100 kilómetros por hora y sentir un aire fresco dejando que acompañe al snowboarder como el destello luminoso de una estrella fugaz.

Osados skaters, surfers o longboarders que se ven tentados en probar nuevos escenarios, llegan a Esquel con la intención de sentir la magia de la nieve, al igual que familias con vital curiosidad y ganas de nuevas experiencias, pueden disponer de un espacio ideal para la práctica deportiva: amplio, seguro y con todos los servicios a disposición. Con la posibilidad de alquilar o comprar equipos, guardería infantil y clases de snowboard para todos los niveles.

La inclusión de esquiadores y practicantes de snowboard dentro del staff, permite contar con el punto de vista de los mismos usuarios de las pistas para el diseño de los predios y el armado de las rampas en el snowpark. Saltos, cajones, barandas y terreno sinuoso, invitan a abordar la nieve, saltando, deslizándose, haciendo maniobras y también piruetas en el mismo polifuncional predio montañoso.

La postura del cuerpo no es la misma para un esquiador que para un snowboarder, a la hora de encarar una parábola. Por ello, la inclusión de los mismos deportistas, junto a diseñadores y armadores con experiencia dentro del equipo de trabajo, es la clave para poder ofrecer una propuesta amplia y divertida.

La palabra diversidad identifica al Centro de Actividades de Montaña La Hoya y su Snowpark, ya que la variedad de pendientes permite contar con dos pistas para principiantes, 12 intermedias, cinco fuera de pistas, siete pistas difíciles y cuatro paseos. Con todas estas opciones, no hay límites para que la competencia o las free sessions se den cita en este lugar.

El fuera de pista y la sensación natural

Deslizarse sobre terrenos con nieve virgen, sin el pisado que realizan las máquinas en las pistas, se está convirtiendo en tendencia para los amantes del snowboard más exigentes.

El zigzaguear entre las lengas de un inmenso bosque, haciendo las primeras huellas de un lugar donde no transitan personas, tomarse unos minutos para contemplar el entorno, genera un regocijo que sólo puede acunar la madre naturaleza que rodea al snowboarder. Sentirse libre es el término, ser parte de la bendición natural.

Esquel es sinónimo de nieve

Una exquisita cocina regional con platos favoritos como truchas o corderos patagónicos, vinos regionales de la ruta más austral del mundo, y las cervezas artesanales sureñas, junto con la amplia propuesta hotelera, de excursiones y actividades, completan la oferta. La invitación es no sólo a disfrutar de la práctica deportiva, sino también a pasar una mañana, una tarde, la noche y hasta una semana en este paraíso, con vistas privilegiadas de la Patagonia andina.

Esquel se destaca por tener la temporada invernal más larga de la Argentina, que se extenderá hasta mediados de octubre gracias a las intensas nevadas registradas este año.

El trabajo del tradicional Centro de Actividades de Montaña del lugar; la trayectoria del Club Andino Esquel, fundado en 1952 y pionero en actividades de montaña; el club Slalom que, desde sus inicios, 43 años atrás, promueve y fomenta la práctica de deportes de montaña y se anima a la innovación con disciplinas extremas que se van abriendo camino; el nuevo Esquel Ski Club; y la existencia del Ente Mixto de Turismo de la ciudad de Esquel confluyen en esta propuesta, dando el marco necesario para experiencias nevadas memorables.

Para más información y consultas:

Secretaría de Turismo de Esquel

infoturismo@esquel.gov.ar

www.esquel.tur.ar