La Organización Panamericana de la Salud y la Organización Mundial de la Salud celebran el 29 de septiembre el Día Mundial del Corazón.
El objetivo de este Día es dar a conocer a todo el mundo las enfermedades cardiovasculares, su prevención, control y tratamiento. Este tipo de enfermedades como el infarto de miocardio y el accidente cerebro vascular son desafortunadamente las más mortíferas del mundo, cobrándose 17,5 millones de vidas al año.
Pequeños cambios en nuestra vida cotidiana como comer y beber de forma más sana, hacer ejercicio y abandonar el tabaco conseguirían reducir la cifra de muertes prematuras causada por este tipo de enfermedades. Sin embargo, si continuamos con nuestro estilo de vida actual se calcula que esa cifra alcanzará los 23 millones de muertes anuales para el año 2030.
Estas son algunas recomendaciones, para que disminuyas el riesgo de padecerlas y mejores tu calidad de vida:
1- Practica una alimentación saludable, equilibrada y variada: Las frutas, verduras, hortalizas, pescado, aceite de oliva, carnes magras, cereales y lácteos desnatados no deben faltar en tu cocina. Recuerda: sal, azúcares y alcohol sólo en pocas cantidades.
2- Dedica 30 minutos diarios a ejercitar tu cuerpo: Elige el ejercicio que más se adapte a tu condición física: caminar, bailar, correr, actividades al aire libre… ¡Muévete por tu salud!
3- No fumes: Y si lo haces, ¡déjalo ya!
4- Controla tu peso: Mide tu Índice de Masa Corporal (IMC).
5- Vigila la grasa acumulada en el abdomen: ya que es peligrosa para el corazón. Mide tu perímetro abdominal a nivel del ombligo. En la mujer debe estar por debajo de 88 cm y en los hombres por debajo de 102 cm.
6- Comprueba tu tensión arterial.
7- Revisa tus niveles de colesterol y glucosa.
8- Conoce tu riesgo cardiovascular y cuál debe ser tu estilo de vida: Acude al médico con un examen físico y tus antecedentes personales y familiares.
9- Comparte tus dudas y problemas.
10- Aprende a controlar tu estrés y ansiedad: El aumento de tensión emocional es peligroso para el corazón. El estrés tu casa y en el trabajo hace más difícil seguir un estilo de vida cardiosaludable. ¡Relajate!