Más de 90 remeros participaron del 5to Canotaje Las Toscas-Villa Ocampo

Una verdadera travesía con amigos se vivió en la zona del Jaaukanigás el pasado viernes 23 y sábado 24 de septiembre en el marco del 5º Canotaje Las Toscas – Villa Ocampo, con la participación de remeros de distintos puntos de la provincia de Santa Fe y de provincias vecinas, como ser Chaco, Corrientes y Entre Ríos.

La quinta edición de esta travesía estuvo coordinada por las Secretaría de Deportes y la Secretaría de Turismo del municipio de Las Toscas, y el área de Turismo de la municipalidad de Villa Ocampo, junto a los clubes de la costa, Club Pato Cuá de Las Toscas y Club Irupé de Villa Ocampo.

La cantidad de participantes superó las expectativas y las distintas localidades de las que provinieron implicó una gran logística para que el evento se desarrollara exitosamente. Entrada la tarde del jueves ya comenzaron a trasladarse los primeros kayakistas que llegaron a esta zona partiendo desde Paraná (Entre Ríos), Rosario, Ybarlucea, Santa Fe, Esperanza, Rafaela, Helvecia, San Javier, Alejandra, Reconquista, Avellaneda, San Antonio, Tacuarendí, Villa Ocampo, Las Toscas (Santa Fe), Resistencia, Barranqueras y Videla (Chaco) y Corrientes Capital.

El lugar de concentración el viernes al medio día fue el Centro de Recepción Turística Regional Las Toscas, para luego partir «en caravana» hasta Puerto Piracuacito, El Rabón. Allí un grupo de 70 remeros aproximadamente arribaron a la costa del Paraná y tras recibir el saludo del Presidente Comunal, Horacio Fisch, de Bomberos Voluntarios Las Toscas y de las Fuerzas de Seguridad de El Rabón, partieron rumbo a Las Toscas.







Una hora les llevó costear el Paraná, con viento sur en contra, pero las postales son un claro reflejo de lo vivido en la entrada al Meneli, entre árboles que forman cascada en las orillas y que abrazan la costa de lado a lado, envolviendo las aguas en túneles verdes de pura vegetación. Es un verdadero paraíso en el corazón del Jaaukanigás.

Luego de recorrer el Cementerio de Pueblos Originarios, Las Tres Bocas, las 14 Vueltas, las Tres Boquitas, arribaron aproximadamente a las 19 hs. al Club Pato Cuá Las Toscas, donde fueron recibidos por el Intendente de Las Toscas, Leandro Chamorro, quien los instó a continuar con esta vida saludable, donde se disfruta del deporte, de los amigos y de la naturaleza, logrando una excelente combinación.

Como todos los años, tras su arribo se armó el campamento y a las 21 hs. tuvo lugar la cena show con la actuación de la banda de rock local «Hijos de Púa». Siempre ese espacio es de intercambio y de encuentro, porque si bien los remadores son de distintas provincias los convoca la misma pasión, el remo, y los abraza y los une el mismo río, el Paraná.

Segundo día de travesía

Al día siguiente, temprano arrancaron las inscripciones y el desayuno para recibir a más remeros que se sumaron durante la segunda jornada. Pese a que las condiciones climáticas no eran las ideales, fuerte viento sur y nublado, participaron de este tramo de la travesía 94 remeros.

Pasada las 8.30 hs. partieron rumbo al Club Irupé de Ocampo, dando un colorido imponente a las arroyos internos que desembocan en el Paraná. Este tramo incluyó paradas, fogatas y fotografías en algunos puntos como el Palometita, Paraná Miní, Arroyo el Loro y Arroyo Ñatiú.

Al mediodía el almuerzo fue en zona de isla, alrededor de un gran fogón, para aliviar el frío y juntar energías para continuar la última parte de la travesía. Poco después de las 17 hs. se dio lugar al arribo de este grupo de amigos al Club Irupé de Villa Ocampo, y pese a ser una de «travesía por momentos dura» como expresaron, llegaron con enorme satisfacción por haber alcanzado una meta más, sin competencia.

Como todos los años, a través de una cena show en el club de la costa de Ocampo se da lugar al intercambio de experiencias, entrega de medallas y sorteo de un kayak entre todos los participantes. Es un espacio también para los agradecimientos finales y el compromiso de que «el río nos vuelva a unir», quizás en otro lugar, en otro evento, llevándose siempre lo más importante de estos encuentros: el cariño de la gente, el que cada uno da y recibe, en la misma medida.

¡¡¡Gracias de corazón, amigos remeros, por haberse sumado una vez más a esta travesía por el Jaaukanigás!!! Serán siempre bienvenidos.