Con la Isla Guaycurú totalmente bajo agua, 30 personas resisten aún en el lugar, «duermen sobre las canoas y palos, no quieren dejar sus cosas por temor a los robos.
Por suerte aún no hubo que trasladar ningún enfermo, pero los riesgos para la salud son importantes, por las víboras, leptospirosis, y otras enfermedades y picaduras de alimañas», explicó la coordinadora regional del Ministerio de Salud Zulema Furrer, al llegar de atender a esos pobladores de uno de los puntos más aislados de la Provincia de Santa Fe, frente a la localidad correntina de Santa Lucía, hora y media de navegación desde Puerto Reconquista. Regresarán el próximo lunes para otra acción preventiva.