La Cámara Alta de la Legislatura provincial dio este miércoles media sanción al proyecto de Presupuesto provincial 2016 enviado por el Poder Ejecutivo. El mismo fue girado a Diputados, donde deberá ser tratado.
Fue este miércoles durante una sesión extraordinaria especial, la última con la actual conformación del cuerpo de senadores, en la que el proyecto tratado recibió un altísimo consenso, ya que sólo votó en contra del mismo Alcides Calvo, quien presentó un despacho propio.
Detalles del proyecto
El Poder Ejecutivo había enviado a la Legislatura el proyecto de presupuesto provincial 2016, con recursos previstos en 103.668.618.000 pesos y un nivel total de gastos estimado en 103.033.308.000. Con un resultado financiero positivo de unos 635 millones de pesos, el cálculo de gastos y recursos para el año que viene fue elaborado teniendo en cuenta un índice de inflación del 17,6 por ciento; una tasa de crecimiento del 3 % y un tipo de cambio a 10,60 pesos.
“Preferimos hablar de la magnitud de las cosas más que de la magnitud del gasto”, expresó el ministro de Economía Ángel Sciara a fines de noviembre pasado al presentar públicamente la iniciativa y fundamentar sus contenidos. Sciara destacó la inversión en gastos de capital, que representa más del 11 % del presupuesto; y las partidas destinadas al rubro Construcciones, que se incrementarán en un 50 %, pasando de 4 mil millones a más de seis mil.
El ministro destacó y confirmó la duplicación del presupuesto para la Administración Provincial de Vialidad, tal como lo había reclamado el gobernador electo, Miguel Lifschitz; y anunció la creación de un Fondo de Infraestructura Vial Provincial, cuyos recursos estarán destinados también a la reparación de rutas. “Por favor, que esto no se confunda con la tasa vial”, clamó el ministro. Este nuevo Fondo estará integrado por la porción de recaudación de Inmobiliario Rural que le corresponde a la provincia -se trata del 50 %, ya que el resto se coparticipa a municipios y comunas- y se estima en unos 500 millones de pesos anuales.
Impuestos
Uno de los pilares de este presupuesto de transición volvió a ser la política tributaria. En tal sentido, el subsecretario de Ingresos Brutos, Sergio Beccari, confirmó un aumento del Impuesto Inmobiliario que oscilará entre un 30 y un 50 por ciento anual. En cuanto al Rural, el monto mínimo de la partida pasará de 324 pesos anuales a 420.
Según precisó el funcionario, “el 60% de las partidas” correspondientes a este tributo pagarán en promedio un 30 % más, en tanto que “sólo el 8 % de los contribuyentes” pagarán el máximo del 50 %. Con estas actualizaciones, la provincia emitiría el próximo año unos 1.057 millones de pesos en materia de Inmobiliario Rural -fue de 752 millones en el corriente año-.
En cuanto al Urbano, el monto mínimo de partida pasará de 156 pesos anuales a 204.
En este caso, se estima que el 54 por ciento de los contribuyentes pagarán un aumento del 30%, en tanto que menos del tres por ciento -2,69 %- pagarán la actualización máxima del 50 %.
También se incorpora como “novedad” para el caso del Inmobiliario, una variación del monto del impuesto sobre la base de la evolución que registre el Indice de Salarios entre marzo de 2016 y setiembre de 2015. “Es un índice que elabora el Indec según incrementos de salarios públicos y privados, que se incorporaría como una forma de ir mitigando la gran distorsión que todavía tenemos en los impuestos patrimoniales.
Implicaría una especie de actualización automática sobre los valores de 2016, que va a ser distribuida en los últimos tres vencimientos del inmobiliario”, explicó Beccari consultado por El Litoral.
En el caso del Rural, se modifica la definición de Grandes Propietarios. Ahora, además de tener en cuenta el monto de las diferentes partidas del impuesto a su nombre, se incorpora el requisito de que posean más de 300 hectáreas.
El presupuesto no prevé aumentos de patente pero sí de Sellos, a partir una duplicación del valor del Módulo Tributario, que pasará de 0,20 centavos a 0,40.
Ingresos Brutos
En materia de Ingresos Brutos, la reforma más significativa que se plantea es la reducción -según dijo Beccari, “a pedido” del propio Lifschitz- de la alícuota para las empresas -unas cien mil y en su mayoría comercios- que no superen el millón de pesos de facturación anual. En esos casos, la alícuota se bajará de 3,6 % al 3 %.
Las empresas que facturen entre 1 millón y 60 millones de pesos anuales no tendrán variaciones en su alícuota, que se mantendrá en 3,6%. Allí se encuentran unos 48.700 contribuyentes. En tanto, se aumenta la alícuota a aquellas empresas que facturen más de sesenta millones anuales. Estos contribuyentes -unos 1.300 en toda la provincia- pasarán de pagar el 3,6 % al 4,6 %.
Quedarán eximidas de pagar Ingresos Brutos las cooperativas que presenten servicios de salud o educativos, y también la empresa Aguas Santafesinas SA.
En otro orden, se aumenta el monto mínimo de facturación anual, a partir del cual quedarán exentas las empresas constructoras e industriales. En el primer caso el monto de 1,5 millones anuales se elevará a 2,25 millones; y en el segundo, de los 80 millones actuales se pasará a 120 millones.
Finalmente, se modifica la alícuota aplicable al expendio al público de combustibles líquidos y gas natural que pasará del 2,5 % actual al 3 %. La pretensión es lograr “una sintonía” con el resto de las jurisdicciones provinciales.
Oportunamente, tanto Sciara como Beccari insistieron en remarcar que las modificaciones impositivas propuestas “buscan dotar progresivamente al sistema de justicia y equidad tributaria, y promover la autonomía de la estructura fiscal provincial, brindando la mayor previsibilidad financiera posible”.
El Litoral
