El Ministerio de Salud provincial, a través del Programa de Control de Enfermedades Respiratorias y Tuberculosis, recordó que en el año 2013, en la provincia, fallecieron por Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) 210 personas (tasa 17.5/100.000 habitantes) según certificados de defunción, en tanto que en la Argentina y en el mismo período, fallecieron 2.596 personas (tasa 18.8 por 100.000 habitantes) por la misma causa.
Así lo indicó el jefe del referido Programa, Bernardo Salvadores, con motivo de conmemorarse el 18 de noviembre el Día Mundial de la EPOC, quién además agregó que “es un grave problema de salud pública y es la causa asociada de un número creciente de muertes prematuras (por debajo de la esperanza de vida) y durante la edad productiva”.
Del mismo modo, agregó que “se calcula que el 9% de las muertes en nuestro país son por enfermedades respiratorias crónicas y son causantes de una importante causa de morbilidad y conllevan una disminución significativa de pérdida de días de vida útiles y gastos sanitarios crecientes, dado que causan el 3% de las internaciones totales, y constituyen una de las principales causas de gastos en fármacos”.
El principal factor de riesgo para la aparición y la progresión de las enfermedades respiratorias crónicas es el consumo de tabaco, por lo que es una enfermedad totalmente prevenible y controlable con el abandono del hábito de fumar.
En este sentido, según datos de la Segunda Encuesta Nacional de Factores de Riesgo y de la Encuesta Nacional de Tabaquismo en Adultos, en Argentina un 22% de la población fuma y un 30% está sometida al humo de tabaco ajeno, estimándose que entre un 10 a un 15% de la población presenta algún grado de EPOC.
LOS SINTOMAS APARECEN DE MANERA TARDIA
La EPOC se caracteriza por la aparición de una obstrucción de las vías aéreas, progresiva e irreversible, que no cambia de forma notable durante períodos de varios meses de seguimiento. Tiene una evolución lenta y gradual, los síntomas aparecen de manera tardía facilitando que no se haga un diagnóstico hasta que la enfermedad está avanzada.
La sintomatología comienza con dificultad respiratoria (disnea), primero ante grandes esfuerzos, como correr o subir escaleras, luego progresivamente se agrava y se presenta ante esfuerzos menores como caminar, bañarse o vestirse.
También la tos persistente a veces con expectoración abundante especialmente matutina al despertarse. La sintomatología se va agravando llegando a producir severa insuficiencia respiratoria donde la persona ya no puede respirar ante mínimos esfuerzos o inclusive en reposo con saturación (insuficiente cantidad de oxígeno en sangre) que obliga a usar aparatos que provean oxígeno para que la persona pueda seguir viviendo.
Cuando se habla de EPOC, se puede referir principalmente a tres procesos diferentes: bronquitis crónica, enfisema, y enfermedad de las pequeñas vías aéreas.
En la práctica, los pacientes presentan características clínicas de los tres procesos a la vez, predominando los síntomas típicos de cada uno en mayor o menor medida, según cada caso. La dificultad para respirar y la tos son los síntomas más comunes, acompañados por otros según la enfermedad.
DIAGNÓSTICO
El diagnóstico de la enfermedad se realiza evaluando la sintomatología, un examen clínico, una radiografía de tórax y, especialmente, con la espirometría, que es el estudio que certifica el diagnóstico y estadifica el grado de afectación de la enfermedad.-