Los gremios estatales y docentes de la provincia cuestionaron la advertencia lanzada ayer por el gobernador electo Miguel Lifschitz, quien pidió a los diputados que «aprueben rápidamente» el proyecto de ley (con media sanción del Senado) que autoriza a un endeudamiento para «contar con los recursos necesarios y no tener dificultades para afrontar el pago del aguinaldo y los sueldos de diciembre y enero».
El secretario general de ATE, Jorge Hoffman, dijo que estas declaraciones «generan un mal clima en el ámbito de los empleados públicos, porque cada vez que se declaran este tipo de situaciones se genera un malestar inmediato en los hospitales, escuelas y organismos». Para el dirigente de los estatales «si ya hay malestar en los jubilados porque se está llevando más adelante la fecha de cobro de haberes jubilatorios, el no pago del aguinaldo puede ser realmente catastrófico».Sostuvo además que pese a la incertidumbre política por el ballottage, «pero no hay ninguna razón para pensar que la provincia de Santa Fe está en una crisis fiscal.
Uno ve como imposible en no cumplimiento del pago del aguinaldo, la gente trabajadora no lo va a tolerar. Y además sería un muy mal comienzo de un nuevo gobierno, se generaría un clima muy poco propicio para arrancar un gobierno con energía y predisposición», agregó.