La salida de vigencia de la ley provincial 13.116 que suspendía los remates de viviendas únicas y que establecía un procedimiento especial en la Justicia para los deudores, volvió a poner en riesgo de subasta las casas de unos 5.500 santafesinos. Así lo estimó Ariel D´Orazio, integrante de la Concejalía Popular de Rosario, un espacio donde en lo que va del año se atendió el reclamo de unos 50 deudores que ya tenían sentencia firme de remate y anticipó que impulsarán una nueva normativa en la Legislatura provincial.
Tras casi una década de sucesivas prórrogas en las suspensiones de remates de hogares familiares luego del cimbronazo de la crisis de 2001, la normativa que dio un marco legal y frenó las subastas de viviendas únicas dejó de brindar amparo.
La ley había sido aprobada por la Legislatura santafesina en agosto de 2010. El texto establecía un procedimiento especial de emergencia, justamente, para proteger las viviendas únicas, familiares y permanentes, e incluía las deudas —sobre todo hipotecarias— contraídas antes de 2001. Pero la norma perdió vigencia en noviembre de 2011. Desde entonces se reactivaron los procesos judiciales y desde comienzos de este año, en muchos casos, los deudores recibieron la sentencia firme de remate e incluso ya tienen fecha de subasta.