El Gobierno de Santa Fe realiza anualmente unas 200 desadjudicaciones de viviendas. La principal causa de estos procesos son las operaciones de venta y alquiler, prohibidas por la normativa vigente, algo que ocurre muy seguido.
Todas las semanas, equipos territoriales de la Dirección Provincial de Vivienda y Urbanismo (DPVyU) recorren la provincia constatando el efectivo cumplimiento de la normativa vigente. Si existiera algún incumplimiento, se inicia un proceso que puede culminar en la desadjudicación de las unidades.
El director provincial de Vivienda y Urbanismo, Pablo Ábalos, informó que «Se realiza un promedio de 200 desadjudicaciones anuales, tanto en los municipios como en las comunas de toda la provincia», estimó Ábalos, quien detalló que la mitad de estas operaciones se concreta en las ciudades de Rosario y Santa Fe. El funcionario aclaró que el proceso de desadjudicación también puede activarse por denuncia de particulares, lo cual se somete luego a la verificación por parte de los equipos de la DPVyU.