PROVINCIALES – El piropo callejero, considerado como acoso, es frecuente y suele despertar temor y defensas por igual. Hay quienes defienden el derecho de las mujeres a caminar sin miedo y otros que consideran que se trata de un halago inofensivo de los varones a las mujeres. El diputado provincial Leandro Busatto (PJ) presentó un proyecto de ley para “prevenir y sancionar” esas situaciones, pero desde la organización Acción Respeto remarcaron que más que avanzar en el castigo hay que trabajar sobre la sensibilización y difusión de la temática.
La iniciativa del legislador apunta a modificar el Código de Faltas de la provincia para incluir la definición del acoso y establecer una pena para quien lo cometiera.
El Artículo 84 bis que propone señala que el acoso sexual callejero es el hostigamiento “mediante todo acto de naturaleza o connotación sexual, cometido en contra de una o varias personas en espacios públicos o de acceso público, sin que mantengan el acosador y la acosada relación entre sí, sin que medie el consentimiento de la víctima, produciendo en la misma intimidación, hostilidad, degradación, humillación, o un ambiente ofensivo en los espacios públicos, siempre que el hecho no constituya un delito”.
Y plantea una multa para quien lo cometa que puede ser “de una a cinco unidades jus (que hoy vale 904 pesos), o de uno a cinco días de trabajo para la comunidad”.
Busatto justificó la iniciativa legislativa en la necesidad de que exista un marco regulatorio para las situaciones de agresión a la que se enfrentan las mujeres en distintos ámbitos.