POR LA DROGA SECUESTRADA EN VILLA OCAMPO – Es el mayor de los cuatro hombres detenidos el mes pasado, por un procedimiento policial en el que se secuestraron 250 kilos de marihuana. El veterano de 75 años había dicho que venía de peregrinar a la Virgen de Itatí.
El juez Federal de Reconquista, Aldo Mario Alurralde, dictó el procesamiento para cuatro hombres de Santa Fe y Santo Tomé, que fueron detenidos el mes pasado en el marco de un procedimiento de policía de provincia, en el que fueron secuestrados 250 kilos de marihuana.
La resolución dictada el martes pasado -19 de mayo- alcanza a los santafesinos Armando Manuel Rojas (75), Pablo Daniel Bordoy (30), Cristian Mauro Lescano (25) y el santotomesino Sergio Daniel Pelleritti Mallea (36). Todos ellos fueron considerados probables coautores del delito de “transporte de estupefaciente con fines de comercialización”, informaron fuentes tribunalicias.
En el caso de Rojas -un emblema en el mundillo del hampa por sus innumerables anécdotas que lo vinculan a robos, estafas y demás delitos-, su defensa había planteado un incidente de detención domiciliaria que fue denegado por el juez de la causa. La Junta Médico Forense del Tribunal Oral Federal de Santa Fe le realizó una serie de estudios el 6 de mayo y convalidó su encierro bajo la órbita del Servicio Penitenciario provincial.
Actualmente “Nando” Rojas se encuentra alojado en la Unidad N° 2 de Las Flores, en un pabellón de cuidado, junto a otros internos con similares dolencias.
Plan frustrado
Rojas viajaba en un Citröen C-4 junto con Lescano y Pelleritti Mallea cuando en horas de la mañana del Jueves Santo los interceptó el Comando Radioléctrico de Reconquista en el acceso a la ciudad. El trío venía escapando desde el norte, cuando en una estación de servicios de Villa Ocampo la policía descubrió un cargamento de marihuana de 250 kilos.
La droga estaba escondida en un auto Peugeot 504 blanco, que iba sobre la plancha de un auxilio mecánico, que fue utilizado para sortear un control de Gendarmería a la altura de Tacuarendí, en el departamento General Obligado. Su conductor Pablo Bordoy trató de escapar, pero fue atrapado por efectivos de la Guardia Rural Los Pumas a campo traviesa.
Tal como pudo establecer la Justicia, el C-4 iba adelante barriendo el camino para detectar retenes policiales cuando se encontró con un control de Gendarmería.
Entonces inventaron un desperfecto mecánico, llamaron una grúa de la ciudad de Villa Ocampo y le pidieron al chofer que lo llevara hasta Santa Fe. El conductor del auxilio les sugirió arreglar el vehículo en su ciudad para abaratar costos -el ftete hasta Santa Fe costaba $7.500-, pero la insistencia para continuar viaje despertó las sospechas del trabajador, que con la excusa de parar a cargar nafta aprovechó para dar aviso a la policía.
Fuga y caída
A pesar de la efectiva intervención policial, los del auto de apoyo lograron escapar y recorrieron 80 km hasta Reconquista donde fueron alcanzados. Si bien tres de los detenidos no prestaron declaración, Rojas relató que venían de Itatí, de visitar a la Virgen, y que no conocía a las personas que lo transportaban y mucho menos al hombre que llevaba la droga.
Entre los elementos de prueba recolectados en su contra cuentan los tickets de las estaciones de peaje, que ubica tanto al C-4 como al Peugeot, en una sintonía perfecta de compañeros de viaje. Además, arriba del C-4 fue secuestrado un teléfono celular que en la tapa de la batería llevaba anotado el nombre del conductor del Peugeot y éste a su vez contaba con un croquis de ruta, con los recorridos que iba a hacer y los lugares donde suele haber retenes policiales y de gendarmería.
El procesamiento fue notificado a las partes en el transcurso de la semana pasada, por lo que no se encuentra firme y no se descarta que sea apelado por alguno de los imputados. Mientras tanto, tres de ellos permanecen alojados en la Alcaidía de la ciudad de Vera, a diferencia de Rojas que por su estado de salud permanece en la cárcel de Las Flores.
El Litoral
