Recomendaciones y prevención sobre enfermedades invernales

PROVINCIALES – El jefe del servicio de pediatría del hospital de Niños “Orlando Alassia” de la ciudad de Santa Fe, Juan Carlos Beltramino, se refirió a las enfermedades invernales, como el rotavirus y la bronquiolitis, y brindó recomendaciones y medidas de prevención a tener en cuenta en esta época del año.Lo hizo al recordar la confirmación de que los casos ocurridos en la provincia de Buenos Aires a fines de junio pasado, fueron por el agente viral “rotavirus”, por lo que sostuvo que en el invierno, “cuando la temperatura desciende, aparecen las enfermedades respiratorias como así también las gastroenteritis virales” siendo el rotavirus “uno de los principales agentes que causan la gastroenteritis”.

“Este virus produce una infección intestinal (o gastroenteritis), que es la causa más común de diarrea severa en niños, especialmente entre los 6 meses y 5 años de vida y es la causa más frecuente por la que concurren al hospital requiriendo atención médica o internación con baja incidencia de mortalidad”, explicó.

Indicó, además, que la “gastroenteritis por rotavirus sucede especialmente en el otoño y en el invierno. No es raro que se dé con catarro o resfrío o que ya venga con alguna infección en vías respiratorias concomitante, hay muy pocas ocasiones que el cuadro sea muy violento. Esto ocurre cuando el chico se deshidrata rápidamente y puede dar formas muy graves”.

MANIFESTACIONES CLÍNICAS

Sobre las manifestaciones clínicas, el profesional señaló que “los chicos que padecen la infección generalmente comienzan con vómitos, es lo primero que hay, y se suele agregar fiebre. Esto se auto limita, la mayoría de los casos no son graves, los síntomas paran entre 7 a 10 días pero hay bebés en los que la intensidad de los vómitos o la diarrea, pueden llevarlos a la deshidratación”.

PREVENCION Y LACTANCIA MATERNA

Respecto de la prevención, Beltramino manifestó que “hay algunas medidas prácticas para prevenir o por lo menos atenuar el impacto del rotavirus en los chicos. La primera es la lactancia materna. El chico que toma pecho realmente está protegido, el tomar leche de madre exclusiva no impide que el bebé pueda infectarse con rotavirus, siendo excepcional que el chico que toma leche materna haga formas graves”.

Sin duda, aseguró que “el tomar leche de madre atenúa la importancia de la enfermedad”.

“Otra forma de prevención es el lavado de las manos, ya que la vía principal de transmisión del rotavirus es la fecal-oral a través de la ingestión de agua o alimentos contaminados y contacto con superficies contaminadas. Se ha sugerido la transmisión por vía respiratoria del virus de persona a persona”, señaló el pediatra.

LA VACUNA LLEGA EN 2015

Una buena noticia ha sido saber que ya hay “una vacuna para hacer en chicos pequeñitos, a los 2 meses y a los 4 meses para prevenir la gravedad del rotavirus”, habiéndose anunciado en Argentina que en enero de 2015 va a comenzar su aplicación. Esta vacuna ya existe en 15 países de toda América que la tienen incorporada desde 2006 en sus calendarios”.

“Los chicos inoculados con la vacuna contra rotavirus, si hacen la enfermedad, la hacen en forma más atenuada y eso está demostrado, ya que disminuye en mucho la cantidad de internaciones de los bebes”, remarcó el profesional.

BRONQUIOLITIS

En sus consideraciones, hizo hincapié también en la “bronquiolitis”, mencionando que en el hospital de Niños Alassia “se asisten unos 1750 chicos por año, de los cuales más de 500 suelen ser internados. Todos los años la bronquiolitis satura los hospitales de todo el país y el Hospital Alassia no es la excepción”.

“La mayoría de las bronquiolitis se auto limitan. Es una enfermedad por la que un pequeño porcentaje de chicos pueden requerir terapia intensiva porque hacen formas graves y la mortalidad está alrededor del 1 por ciento. Uno dice 1 por ciento es poco, pero si estamos hablando de que lo habitual es que se internen 500 chicos por bronquiolitis, 5 chicos, cuando sucede, es doloroso”, subrayó.

Finalmente consignó que “un 50 por ciento de esos chicos van a reiterar episodios de bronqueo espasmo cada vez que se resfríen, o sea que pueden repetir el cuadro. Sin embargo ello, no impide que el bebé crezca bien y la mayoría de estos chicos que hacen estos broncoespasmos, después de los 2 o 3 años, mejoran”.