Un conflicto que se destraba

VILLA OCAMPO – Comenzó a sesionar por primera vez este mediodía en la sede municipal de Villa Ocampo, con la presencia del Ministro de Trabajo, Julio Genesini, autoridades gubernamentales locales, sindicato azucarero y los empresarios propietarios del ingenio.Antes de la reunión, el intendente Enrique Paduán, dijo: “Conseguimos que la Mesa Azucarera, que es nuestra asociación para el desarrollo, facilite los fondos a Inaza para pagar parte de lo adeudado con la condición de que luego la provincia devuelva ese dinero a la entidad, y que la empresa a su vez haga lo propio durante la zafra 2013”.

El funcionario estimó que los $ 250.000 alcanzarán para “el 50 por ciento de lo que se debe a los empleados de planta permanente, lo otro tendrá que ponerlo la empresa Inaza. La idea es que nos reunamos hoy para ver de qué manera se avanza en la solución integral del conflicto, cómo se garantiza la zafra del año que viene que será a mitad de año”.

Para Paduán, el motivo que desencadenó el incumplimiento del empleador – que disparó la manifestación obrera – tiene que ver con “la falta de previsiblidad, porque a pesar de que este año tuvimos una de las peores zafras de la historia, los años anteriores fueron mejores, entonces hay que administrar bien cuando viene bien para tener cuando se complica”.

En ese sentido, puso blanco sobre negro al sostener que “sin ir más lejos, en Las Toscas (15 kilómetros al norte) hay otro ingenio gestionado por una empresa que no tiene problemas de este tipo y que hasta incentiva y subsidia la siembra de caña”.

Ahora es tiempo, concluyó de ver “cómo se avanza, qué proponen los empresarios que tienen que conseguir el resto de la plata para normalizar la situación, y también escuchar a los obreros si aceptan la propuesta a futuro”.

INCERTIDUMBRE

El Ingenio Arno era de propiedad municipal en un principio, pero luego sus acciones pasaron a una cooperativa del mismo nombre. En medio de la crisis del 2.008 la firma Inaza SA, con sede en Guadalupe Norte, se constituyó en propietaria. Nacido en 1936, a lo largo de su historia pasó por un número casi indeterminado de manos, siempre con suerte dispar. En la actualidad, la empresa al frente atraviesa una convocatoria de acreedores de monto millonario que pone en duda el futuro de la planta azucarera.

La comunidad de Villa Ocampo asiste con pesar a esa realidad que además afecta por igual al frigorífico local y a la papelera, también convocados. Es decir que las tres naves insignias de la producción local, generadoras de la mayor parte de los empleos, navegan en medio de un clima de incertidumbre.