Incendio destruyó una fábrica de Vicentín

AVELLANEDA – A las 2:15 de la madrugada de este sábado se inició un voraz incendio que destruyó toda la fábrica de algodón Estrella que Vicentín tenía en su parque industrial de Avellaneda, con pérdidas millonarias en maquinarias, insumos y el edificio inutilizable.»Conectamos las mangueras y no había agua, boludo!!!», le contaba un obrero a otro que llegó preocupado por su fuente de trabajo. Otros sumaron idéntica apreciación, asegurando que de haber tenido agua hubieran evitado el desastre ya que el fuego «comenzó con 10 fardos y tranquilamente hubiéramos podido apagarlo», coincidían los angustiados que miraban su fuente de empleo consumida por las llamas.

Explicaron que ante la falla del sistema de seguridad interno el fuego ganó protagonismo hasta transformarse en imparable. Decían que cuando llegó la primera dotación de bomberos -que no tardó mucho- el fuego ya había pasado de los fardos al sector de máquinas. «El fuego empezó a cruzar por las banderolas y rápido tomó el techo que era muy inflamable, todo ardió muy rápido», explicaban los azorados testigos que tuvieron que correr para salvar sus bicis y motos.

El fuego tomó la totalidad de la planta. Destruyó todo, incluyendo el edificio. Trabajaron bomberos voluntarios de Reconquista y Avellaneda con apoyo de tanques y personal municipal renovando el agua de las cisternas, policías, AME y gendarmes, quienes tienen su sede al lado de la fábrica destruida. En el lugar también estuvo el secretario de gobierno municipal, Martín Ponticelli.

UNA GRAN FUENTE DE EMPLEO
Vicentín daba trabajo en esa moderna planta que se destruyó, a más de 200 personas que trabajaban en la elaboración de los productos algodón hidrófilo «Estrella», desde el año 2007. Allí elaboraban desde el simple algodón hidrófilo a soluciones en formatos específicos para la medicina, belleza, mujer y bebés. Ingresaba el fardo de fibra de algodón y salía el producto terminado, ya empaquetado listo para ir a las góndolas.

Vicentín comenzó en 1929, en Avellaneda, siendo un comercio familiar que luego se convirtió en una industria que hoy tiene varios emprendimientos productivos: fábrica de aceites vegetales, biodiesel, comercialización de cereales, desmotadora de algodón, hilandería, fábrica de algodón hidrófilo para la emblemática marca «Estrella», frigoríficos, producción de vinos, insecticidas, herbicidas y hasta su propio puerto de embarques sobre el Río Paraná, en San Lorenzo, cerca de la Ciudad de Rosario.
Gustavo Raffín