RECONQUISTA – Tres vehículos dañados, paneles de cristales rotos y el portón salido de escuadra a consecuencia de los impactos de los automóviles, son las principales consecuencias del accionar de un adolescente que ingresó al sector Usados de Trosch Autos.El hecho ocurrió a las 9:30 de la mañana del domingo 2 de octubre de 2011, cuando un adolescente ingresó al sector Usados de Trosch Autos, con la pretensión de sustraer un automóvil porque «quería pasear» con sus amigos y un hermano de 20 años que esperaban afuera. «Algo me dieron de tomar», dijo al ser atrapado por policías. Pero no estaba alcoholizado ni parecía drogado.
Tienen 20 años y se los acusa de robo de automotor en grado de tentativa. En cuanto al menor que ingresó al local, por tener 15 años es inimputable y no puede estar preso. La Subsecretaría del Menor del Gobierno Provincial dispuso que sea entregado a sus padres, pero hasta las 20:50 su madre no iba a buscarlo. Avisó que iría al salir de su trabajo. Mientras, el pibe hace tiempo esperando en la comisaría.
Al ingresar al local de Bulevar Yrigoyen 726, el auto que eligió para su pretendido «paseo» fue un Ford Fiesta color gris HKN 637. Pero delante había otros tres vehículos, frente a la vidriera y empezó a remover obstáculos, con un detalle: ni sabe manejar. Ni supo quitar los frenos de mano. Comenzó con el Peugeot 206 EUK 636 con el que chocó la doble puerta sacándola de escuadra y rompiendo un cristal.
Desistió de ese auto y pasó a la Chévrolet Zafira EFG 070 con la que embistió la puerta derecha del Peugeot, que había quedado abierta. Tampoco podía salir con la Zafira porque estaba entre el Peugeot y la columna.
Al tercer y último auto al que subió es el Ford Ká rojo DML 630 con el que embistió la vidriera y la doble puerta blanca, tal como se ve en una de las fotos. Todo esto durante casi media hora, con muchos testigos que a esa hora pasaban por la vereda caminando y parecían no entender nada. Como el desastre llamaba cada vez más la atención y más gente se paraba a verlo, el adolescente se escondió hacia el fondo de la concesionaria mientras sus amigos que permanecían en la vereda salieron corriendo.
Lo mismo quiso hacer luego el malogrado chofer pero lo atrapó la policía que concurría al lugar advertido por el llamado de una mujer que dijo que algo raro estaba pasando, con un auto que embistió la vidriera.
Al lugar llegaron luego el propietario de la empresa: Eduardo Trosch (que estaba en el Autódromo de Avellaneda donde hay competencias de las categorías zonales), su familia y empleados, mientras que peritos de la policía científica revisaban detenidamente cada detalle buscando huellas y pruebas.
El Juez Penal Juvenil, Jorge Fenández, dijo que ordenó a la policía que busque a todos los involucrados y luego tomará contacto con ellos, aunque anticipó que los menores de 16, al ser inimputables, son competencia de la Subsecretaría del Menor, organismo del gobierno provincial.
Rodrigo Rolón, 20; y Leonardo Javier Díaz, 20; son los dos detenidos incomunicados por robo de automotor en grado de tentativa. Sospechan que son dos de los que ayudaron al menor para que ingrese al local y le hicieron el aguante detrás de la vidriera.
Gustavo Raffín