QUIERE VER PRESO A SUS PADRES – Charo tiene 18 años y fue violada por su padrastro desde los 12 años hasta que a los 15 nació su primera hija, producto de esta relación incestuosa.Asegura que la tortura sistemática continuó a sabiendas de su propia madre, a la que también quiere ver presa. “Tendría que haber defendido a su propia hija a capa y espada”, recriminó.
El caso se judicializó cuando un familiar a quien aprecia como «tía» la alentó a recurrir a la radio a ventilar el caso. La policía fue a verla, la trajeron a la comisaría de la mujer e inmediátamente el juez Palud ordenó la detención del padrastro.
Tras la judicialización del testimonio de la joven, también podría ordenarse la detención de su madre. Típico de un padrastro violador, la seguía a sol y sombra. No le daba un respiro. No la dejaba socializar con nadie. Era un celoso feroz, posesivo. «Si me encontraba hablando con alguien me pegaba con un trenzado y me dejaba en cama día y medio. Y mi madre no le decía nada». Tampoco dijo nada cuando quedó embarazada. Ni hablaba del tema. La madre era cómplice, asegura. Por eso la quiere ver presa.
La joven describió su «infierno de asco y terror. No me dejaba vivir», expresó.
Gustavo Raffín