DE ACUERDO A LOS PRONÓSTICOS METEOROLÓGICOS – Los pronósticos meteorológicos siguen adelantando un otoño muy lluvioso y con riesgo de inundaciones. Es que «El Niño» creció, llegó a la madurez y -lejos de aflojar- va a alcanzar su máxima intensidad en febrero. Por el Ing. Agr. Fernando Zanier.Encima no se «disiparía» en marzo, sino que podría prolongarse hasta bien entrado el invierno. Según Eduardo Sierra, las tormentas localizadas severas, con aguaceros torrenciales, granizo y vientos podrían alcanzar una frecuencia superior a la normal.
Esto trae como consecuencia lo que podemos ver en cualquier recorrida por los campos de la zona, retrasos en la siembra, la mayoría de los lotes se implantaron a partir de fines de diciembre y las persistentes excesivas lluvias malograron la emergencia dejando lotes “manchoneados” y múltiples resiembras con lo que esto significa para los costos en los menguados bolsillos de los productores después de los dos últimos años de seca.
Una vez implantados los cultivos y ya superado este pequeño déficit hídrico de fines de Enero y principios de Febrero se espera que las lluvias acompañen un buen desarrollo del cultivo, aunque hay que prestar especial atención al avance de las plagas y enfermedades, ya que estas condiciones de alta humedad y temperatura son propicias para el desarrollo de las mismas. Hay que estar atentos para tomar las decisiones en el momento propicio, porque cuando las lluvias son abundantes la ventana de aplicación son muy pocos días entre lluvia y lluvia, para el caso de las enfermedades de fin de ciclo en soja hay que tener en cuenta que s partir de floración comienza la etapa de riesgo de Roya Asiática de la Soja (RAS) favorecida por plantas con mucho follaje donde se concentra la humedad.
Otro aspecto a tener en cuenta en este “año niño” es la logística, en el momento de cosecha, las lluvias y las dificultades por «falta de piso» en los lotes se pueden convertir en un verdadero problema retrasando las tareas de cosecha. De prolongarse las lluvias hasta entrado el invierno quien más va a sufrir de la falta de piso va a ser la zafra cañera, lo que puede llegar a prolongar en el tiempo y en dificultades el trabajo de los productores. Pero no olvidar, es mejor lidiar con un leve (y remarco leve) exceso de agua que no tenerla.
Ing. Agr. Fernando Zanier