NO QUIERE ASUMIR ANTES DE JUNIO – La presidencia del club le aceptó la dimisión. Este sábado el Virrey se reunió con Amor Ameal y volvió a desestimar la oferta de ser de DT del equipo. Boca anunciaría mañana quién será el nuevo técnico xeneize.Carlos Bianchi dejó de ser el manager de Boca Juniors tras un año en esa función y luego de rechazar el pedido de la dirigencia de que asuma como entrenador.
La máxima autoridad en el club, Jorge Amor Ameal, dispuso iniciar una rápida gestión para contratar al nuevo entrenador y salió a buscar a Guillermo Barros Schelotto, jugador del Columbus Crew de Estados Unidos, y Diego Cagna, si bien el segundo de los candidatos, el que más chances tiene de asumir.
Esta noche o a más tardar mañana se haría un anuncio oficial sobre el nuevo DT que reemplazará al renunciante Alfio Basile.
Se especulaba que Ameal podría darlo a conocer mañana en el marco de la presentación del volante Jesús Méndez como nuevo jugador de Boca. Ya ni siquiera Ameal, el hombre que llevó a Bianchi casi al máximo poder en el club, aceptó que continúe en la función que lo fue erosionando en el ambiente xeneize, que reclamó una y otra vez que asuma como entrenador.
Según supo DyN, Ameal y Bianchi decidieron anoche poner fin a la relación, que se inició un año atrás, cuando el presidente recién asumido por la muerte de Pedro Pompilio, lo eligió para manejar el fútbol, y licuar el poder de los vices José Beraldi y Juan Carlos Crespi.
Entrada la madrugada Marcelo London, el dirigente que ganó poder por la confianza que le depositó Bianchi, y Rómulo Zemborain, lo intentaron convencer, pero mantuvo su postura de no aceptar el reto del tercer período como entrenador y apostó a Abel Alves como técnico interino con posibilidades de seguir hasta junio y allí sí calzarse el buzo.
Así como Ameal había aceptado que Bianchi se abstuviera de reemplazar a su amigo Carlos Ischia, quería tenerlo, como todos los dirigentes xeneizes, si defeccionaba el siguiente técnico. Y tras un semestre sin luces y con muchas penas, se fue Basile.
Era el tiempo de Bianchi, pero no acató el pedido. Y Ameal se metió de lleno para buscar nuevo técnico y rumbeó entre Guillermo Barros Schelotto, en actividad como jugador en el Columbus Crew de Estados Unidos, y Diego Cagna, aquel volante del Boca exitoso que llevó a Tigre a dos subcampeonatos y que estuvo siempre listo para el convite boquense.
Por la mañana, en Mendoza, cuando se le consultó sobre su continuidad Bianchi respondió: ‘hoy estoy acá‘. Bianchi había asumido con un contrato por tres años a cambio de 1,5 millón de dólares, aunque bajó a la mitad su sueldo haciendo causa común con el achicamiento de gasto del club.
Armó una pretemporada plagada de amistosos en Europa que dejaron buen rédito pero desgaste de los jugadores que no encontraron rumbo durante los últimos seis meses. Peleó y logró repatriar al arquero Roberto Abbondanzieri, de flojo rendimiento. Ninguna gestión salió con beneficios para Boca, al menos en los números deportivos.
Fuente: DyN